Tres chinos que se encontraban retenidos en varias habitaciones cerradas con candados fueron liberados el pasado lunes día 30 de marzo dentro de la operación contra el tráfico ilegal de inmigrantes que efectuó la Policía Nacional y en la que fueron detenidas 54 personas.
Según ha informado hoy el Ministerio del Interior, el Cuerpo Nacional de Policía desarticuló el pasado lunes una organización dedicada al tráfico ilegal de ciudadanos chinos y detuvo 54 personas en Barcelona, Santa Coloma de Gramanet y Badalona (Barcelona).
Entre los detenidos se encontraban los cinco máximos responsables del grupo en Cataluña, que formaban parte de una red de tráfico de personas que se dedicaba a captar personas en China, traerlas a España y hacinarlas en pisos en espera de ser finalmente trasladados a Gran Bretaña.
En los registros practicados por la policía, los agentes encontraron tres víctimas que estaban retenidas en habitaciones cerradas con cadenas y candados.
En total, la policía realizó nueve registros, en los que intervinieron 26.000 euros en efectivo, 14 pasaportes falsificados de diferentes nacionalidades, un sello húmedo de entrada en territorio Schenger que utilizaban para falsificar pasaportes, 40 pasaportes chinos con estampaciones de entrada en España y en otros países de la UE falsificadas y 15 equipos informáticos con datos sobre las actividades delictivas de la organización desarticulada.
Los cinco máximos responsables de la organización detenidos están imputados por asociación ilícita, falsedad documental, detención ilegal y delitos contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.
Los otros 59 detenidos están acusados de delitos de falsedad documental e infracción a la ley de extranjería.
La red desarticulada, que también cuenta con colaboradores en China y otros países, disponía en Cataluña de la complicidad de diversos establecimientos comerciales regentados por ciudadanos chinos con residencia legal en España, en los que recibían los paquetes de pasaportes falsificados que habían sido sustraídos a sus titulares y que eran remitidos desde China.
Los envíos postales de los pasaportes sustraídos iban escondidos entre revistas y libros de doble fondo.