El Ministerio de Defensa de Bolivia emitió ayer una resolución que ordena a las Fuerzas Armadas (FF.AA.) a abrir sus archivos para la búsqueda de los desaparecidos en dictaduras como las de Hugo Bánzer (1971-1978) y Luis García Meza (1980-1981).
Los ministros de Defensa, Walker San Miguel, y de Justicia, Celima Torrico, presentaron esta resolución que da respuesta a las peticiones realizadas por tres mujeres que hace quince días están en huelga de hambre para exigir la apertura de los archivos.
San Miguel explicó que se permitirá a los familiares de los desaparecidos pedir los documentos clasificados con la ayuda de miembros de la privada Asamblea de Derechos Humanos, notarios y funcionarios del Gobierno.
También señaló que el presidente Evo Morales, por su línea ideológica, está interesado en que se aclaren las desapariciones producidas durante las dictaduras asociadas en el Plan Cóndor, que fue una alianza de Gobiernos de facto para reprimir a izquierdistas.
Hace unos días Morales declaró a la prensa internacional que no había nada que desclasificar en los archivos militares sobre el tema porque no existía esa información, lo que provocó reacciones críticas entre los activistas de derechos humanos.
San Miguel sostuvo hoy que mucha de la información de esa época también desapareció o fue destruida, pero la resolución emitida hoy pretende abrir los archivos existentes para aclarar lo sucedido en los Gobiernos militares.
La decisión se produce cuando hoy tres mujeres, entre ellas una chilena, cumplen quince días de huelga de hambre para exigir la apertura de los archivos.
Las huelguistas son la chilena Marta Montiel, cuyo padre, Tirso Montiel Martínez, fue miembro de una guerrilla boliviana en la década de los setenta, la cual fue abatida por el Ejército en el trópico del departamento de La Paz.
Una de las bolivianas en ayuno es Olga Flores, cuyo hermano, Juan Carlos Flores, desapareció en 1980 durante el asalto de bandas paramilitares a la sede de la Central Obrera Boliviana (COB).
La otra es Hortensia Gutiérrez, esposa de Rodolfo Flores, que desapareció en 1968 durante el Gobierno militar de René Barrientos.
El grupo de huelguistas anunció que analizará jurídicamente la norma emitida hoy por el Gobierno para saber si es suficiente una resolución ministerial para lograr que las FF.AA. abran sus archivos.
Olga Flores dijo a Efe que la documentación clasificada en manos de las Fuerzas Armadas está protegida por una ley, de tal forma que este momento no saben cuál es el alcance de decisión tomada por el Ministerio de Defensa.
San Miguel también señaló que el presidente Morales ha pedido desde 2006 que los militares entreguen la información que sea necesaria para aclarar el destino de los restos del líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz, asesinado en 1980, durante el golpe de García Meza, pero la información también desapareció.
Los familiares de Quiroga han exigido a Morales insistir en esa petición a los militares para honrar la memoria de ese dirigente socialista, ya que el lo reconoce como un ejemplo en su carrera política y en la lucha contra la corrupción.