El Gobierno de Bolivia ha invitado a España a asistir al acto de conmemoración del bicentenario de la independencia de este país sudamericano que tendrá lugar el próximo 16 de julio en La Paz, según ha informado ayer el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.
Moratinos ha expresado su agradecimiento por este gesto durante su comparecencia ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso para evaluar la política de su departamento.
El ministro, quien se reunió en Madrid con su colega boliviano, David Choquehuanca, el pasado día 10, ha interpretado esta invitación como una «voluntad de diálogo y de mejor comprensión» entre ambos países.
Bolivia ha abierto este año las celebraciones de los bicentenarios de independencia de las repúblicas iberoamericanas.
El primer acto se celebró el pasado día 25 en la localidad de El Villar, a 200 kilómetros de Sucre, donde tuvo lugar el primer alzamiento contra España hace 200 años.
A esta insurrección siguió la de La Paz el 16 de julio y después la formación de una Junta de Gobierno en Quito (Ecuador) el 10 de agosto del mismo año, mientras que en otras ciudades de América los alzamientos contra España se dieron en 1810.
En su comparecencia, Moratinos se ha referido a la corriente indigenista que cobra fuerza en América Latina, como en el caso de Evo Morales en Bolivia.
A juicio del ministro, «el indigenismo merece una mayor reflexión, más objetiva y no tan ideologizada, por parte de la sociedad española y los grupos políticos».
«Son actores cada vez más representativos y con mayor capacidad de influencia. Por parte del Gobierno sería un error identificarlos con simples movimientos populistas o radicales. Lo que ha faltado a lo largo de mucho tiempo son espacios de diálogo y concertación con estas comunidades», ha argumentado.
Moratinos ha añadido que el deseo de España de acompañar la conmemoración de los bicentenarios es una muestra de acercamiento a estos grupos indígenas y de «mirar de forma positiva al futuro».
El portavoz de Exteriores del PP, Gustavo de Arístegui, ha respondido que su partido nunca ha criticado estos movimientos, pero sí el que amparan mandatarios como Evo Morales, cuyo indigenismo es «estalinismo».