La Justicia chilena negó el pago de una indemnización a los antiguos propietarios en Perú y Chile de la desaparecida aerolínea Aerocontinente, cuyo fundador, el peruano Fernando Zevallos, cumple una condena de 20 años de prisión en su país por vínculos con el narcotráfico.
La Corte de Apelaciones de Santiago ratificó así la decisión del 17 Juzgado Civil de la capital chilena, que desestimó la petición al considerar que cualquier acción de este tipo debe ser presentada ante el juez especial designado para investigar el proceso de Aerocontinente.
En junio de 2008 la Corte Suprema de Chile accedió pedir a Perú la extradición de los hermanos Fernando y Lupe Zevallos, dueños de la aerolínea AeroContinente, que quebró en 2004, así como de Jorge Portillo, esposo de Lupe y ex gerente general de la aerolínea en Chile.
Los tres fueron procesados en Chile en septiembre de 2003 junto al ex gerente operativo Desme Hurtado, también peruano, por asociación ilícita para el lavado de dinero procedente del narcotráfico y por presentar testigos y documentos falsos en el juicio por esos hechos.
Fernando Zevallos fundó en 1992 la compañía AeroContinente, que operó en Chile entre 1999 y 2001, año en que los tribunales chilenos decretaron la intervención judicial de la compañía en este país, que dio origen a la petición de indemnización.
Zevallos, considerado como uno de los «capos» del narcotráfico en Latinoamérica, vivió al filo de la ley desde 1995, cuando se le vinculó a un cargamento de 3,5 toneladas de cocaína que la banda «Los norteños» iba a enviar a Estados Unidos.
En 2005 el conocido como «Lunarejo» fue condenado en Perú a 20 años de prisión por tráfico de drogas, receptación ilegal de dinero y lavado de activos procedentes del narcotráfico a través de la compañía aérea, que había dejado de operar un año antes.