El canal de televisión ecuatoriano Teleamazonas, amenazado por el Gobierno del país con su clausura, ha negado haber violado la ley de Radiodifusión, por la emisión de una grabación no autorizada de una reunión del presidente, Rafael Correa, en su despacho.
El propio Correa, en un informe, ha dicho que pedirá la clausura de Teleamazonas por haber incurrido en una de las infracciones que establece el reglamento y la ley de Radiodifusión.
«No se ha violado ninguna ley», ha declarado sin embargo el director de noticias de Teleamazonas, Carlos Jijón, en declaraciones a periodistas, y ha dicho que su emisora no ha sido notificada por ningún organismo competente para tramitar este tipo de casos.
Según Jijón, su cadena, «de ninguna manera», ha violado la ley y ha recordado que el presidente Correa «no tiene atribuciones para ordenar el cierre de un canal».
También ha apuntado que la grabación clandestina difundida por su emisora «no afecta a la integridad de ninguna de las personas» que participan en la grabación de audio y ha recordado que en ella se escucha una conversación del mandatario con ministros y asambleístas.
Correa ha dicho que en pocas semanas solicitará que se sancione a Teleamazonas por la difusión de la grabación, lo que supondría la cuarta infracción de la emisora y, como consecuencia, según la ley, podría ser clausurada.
«No les tengo miedo, no me tiembla la mano y pediré la cuarta infracción en pocas semanas, para que Telamazonas sea definitivamente clausurada. ¡Ya basta de tanta porquería!», ha subrayado Correa.
Además, ha afirmado que procesará al político Fernando Balda, del opositor Partido Sociedad Patriótica (PSP), por entregar esa grabación en el marco de una denuncia contra el Gobierno, al que acusó de cambiar el texto de la nueva Constitución, aprobada en referendo en septiembre del año pasado.
Correa ha asegurado que en esa grabación no se establece ninguna irregularidad y ha señalado que el asunto ha sido usado por Balda para atacar a su Gobierno.
El mandatario además ha asegurado que el hecho de que se difunda una grabación secreta de una reunión en el despacho presidencial podría incurrir en un delito de seguridad nacional y ha expresado sus sospechas de que Sociedad Patriótica tenga colocados micrófonos en la Presidencia.
«Han grabado y espiado una reunión en el despacho del presidente de la República; eso es un atentado a la seguridad nacional y este pobre hombre (Balda) se va a ir preso», asegura Correa.
