Con apenas 17 días desde que asumió la presidencia, Javier Milei presentó ante el Congreso argentino un extenso proyecto de ley que abarca múltiples reformas, marcando la culminación de su plan para impulsar cambios liberales significativos en la historia de Argentina.
Milei, cuando asumió la presidencia, vio a su ministro de Economía, Luis Caputo, anunciar 10 medidas de emergencia para enfrentar la crisis económica, incluyendo una drástica devaluación del peso, que perdió la mitad de su valor frente al dólar en un solo día.
En su segunda semana de gobierno, Milei reveló un polémico «Decreto de Necesidad y Urgencia» (DNU) a través de la cadena nacional. Este DNU busca modificar o derogar 366 leyes que regulan varios sectores económicos, generando controversia y provocando manifestaciones y cacerolazos por parte de los ciudadanos.
En su tercera semana de mandato, el vocero presidencial Manuel Adorni informó sobre el envío al Congreso de un conjunto de leyes titulado «Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los argentinos», que será tratado en sesiones extraordinarias.
El proyecto legislativo más destacado incluye la solicitud de declarar una «emergencia pública» en áreas como la económica, financiera, fiscal, previsional, de seguridad, defensa, tarifaria, energética, sanitaria, administrativa y social hasta fines de 2025, con posibilidad de prórroga por el Poder Ejecutivo por hasta dos años adicionales.
Ley ómnibus
Este proyecto otorgaría a Milei un poder considerable sobre áreas que actualmente solo puede legislar el Parlamento, otorgándole una autoridad casi omnipotente sobre temas cruciales durante su mandato.
El paquete de leyes presentado abarca reformas tributarias, laborales, penales, energéticas y electorales, con más de 600 artículos que modifican cerca de veinte leyes. Propone privatizar unas 40 empresas estatales, cambiar el sistema electoral y establecer límites más estrictos para las manifestaciones, con penas más severas para quienes interrumpan servicios públicos o utilicen armas en este contexto.
Sin embargo, la viabilidad de este extenso paquete legislativo es cuestionable, ya que es poco probable que la totalidad de los 664 artículos de la «ley ómnibus» sean aprobados. A pesar de la victoria de Milei en la segunda vuelta electoral, su partido La Libertad Avanza cuenta con una minoría en el Congreso, lo que limita significativamente la aprobación de estas propuestas.
El futuro del «megadecreto» será discutido en las sesiones ordinarias a partir de marzo, ya que su entrada en vigor está programada para el 29 de diciembre, a menos que sea detenido por la Justicia antes de esa fecha. A diferencia del paquete legislativo, el DNU deberá ser aprobado o rechazado en su totalidad por la mayoría de las Cámaras para entrar en vigencia.