Ocurrió en Brasil, y no se sabe si usaba preservativo. Es un hombre que tuvo una imperiosa necesidad sexual, y que al parecer no encontró mejor ‘agujero’: calentito y echando humo.
Bromas aparte, -que todo cabe sin ofender a los más pudoroso de cara a la galería-, las escenas del vídeo que acompaña a estas líneas son patéticas a más no poder.
Las mismas fueron grabadas cerca de una concurrida carretera, y recogen el momento en que el pervertido de turno se ‘fornica’ a un flamante y ‘provocativo’ Volkswagen metiendo el pene en el tubo de escape.
El vaivén no deja lugar a dudas, y a pesar de que el que graba la escena le interpela, el aludido sigue a lo suyo como si tal cosa.