Al joven vecino de Rayong, Tailandia, no se le olvidará jamás la absurda experiencia que ha vivido por propia voluntad, y que le ha dejado sus genitales hechos unos zorros.
En las últimas horas, y sin al parecer nada mejor que hacer, se acercó con unos amigos a una carretera secundaria de su localidad y, tras rebozar estos unas ramas con un buen puñado de hormigas coloradas -insectos mordiscones donde los haya y también llamados ‘hormigas de fuego’- se las restregaron por el pene.
CHILLANDO COMO UN CERDITO
Sin querer faltar el respeto del intrépido Justin, -basta observar el vídeo-, el mentado acabó dando unos chillidos de espanto, que hacen recordar a los gruñidos que da un cerdito cualquiera cuando es perseguido por el Carpanta de turno, con aviesas intenciones culinarias.
Al parecer, quería imitar a los actores de Jackass, serie estadounidense donde los protagonistas se dedican a hacer el indio en actividades de máximo riesgo.
De no ser por los amigotes, el bueno del tailandés no lo cuenta, auque no se libró de pasarse varios dia en un hospital con los cataplines hinchados como una sandía.
En una entrevista con el diario ‘TomoNews‘, Justin describió el dolor que había sentido como
«agudo, repentino y ligeramente alarmante».