Las lluvias torrenciales, que causan daños por un millón de dólares diarios al turismo y han arrasado 9.000 extensiones de tierras agrícolas
La evacuación de unos 2.000 turistas que quedaron varados por las fuertes lluvias en el pueblo de Machu Picchu se realiza este martes en medio del caos, pues los helicópteros destinados a esa tarea no dan abasto y abundan las quejas por una presunta prioridad a los más adinerados.
Al despejarse el cielo de Cuzco se reanudó el puente aéreo para trasladar al pueblo de Ollantaytambo a los extranjeros varados desde el domingo pasado en Machu Picchu, informó la agencia estatal Andina.
El guía turista Fred Reyes relató a CPN Radio que se ha dado preferencia a los turistas que poseían boletos del exclusivo servicio ferroviario Hiran Binghan, según declaraciones al portal de noticias elcomercio.pe.
El primer ministro peruano, Javier Velásquez, dijo a periodistas en Cuzco que las autoridades intentan reunir más helicópteros para la evacuación de los turistas y reponer las infraestructuras como puentes y carreteras dañadas por deslizamientos de lodo y piedras.
Los esfuerzos son limitados, por eso se espera la llegada de otros helicópteros de las fuerzas armadas y de la embajada de Estados Unidos, así como otras naves alquiladas por las empresas PeruRail y Orient-Express Perú, a cargo de los servicios ferroviarios entre Cuzco y Ollantaytambo con Machu Picchu.
Si bien el ministro peruano de Comercio Exterior y Turismo, Martín Pérez, aseguró ayer que existen provisiones en el pueblo de Machu Picchu para satisfacer las necesidades de los turistas, los problemas de salud y hacinamiento comienzan a notarse.
«La situación es complicada, además, ya comenzaron los brotes de gripe y los problemas estomacales. El frío es implacable y no contamos con colchonetas ni frazadas», dijo, Fernando Celis, uno de los 200 turistas chilenos varados en Machu Picchu, a elcomercio.pe.
A merced del temporal, muchos turistas duermen en tiendas de campaña en la plaza de armas de Machu Picchu, situado en las faldas de la montaña donde se levanta la ciudadela inca.
Allí los precios de los alimentos y el alojamiento se han duplicado y la cotización del dólar ha aumentado a precios inaccesibles para los «mochileros».
«Ayer sólo nos repartieron medio litro de agua y nos permitieron dormir en el local del Instituto Nacional de Cultura (INC). Allí, cerca de 500 personas debemos compartir dos servicios higiénicos», contó Celis.
Ante la emergencia, el cónsul chileno en Lima, Alejandro Marisio, tiene previsto llegar este martes a Cuzco para dar asistencia a sus compatriotas, quienes se suman a los 500 argentinos varados en Machu Picchu.
Las fuertes lluvias ya han cobrado la muerte de una turista argentina Lucila Ramballo, y el guía turístico peruano Washington Huaraya, quienes recorrían el Camino Inca que conduce a Machu Picchu.
Por su lado, el presidente regional de Cuzco, Hugo Gonzales, confirmó la muerte de siete pobladores, aunque el Instituto de Defensa Civil (Indeci, encargada de hacer frente a los desastres) sólo reconoce dos fallecimientos.
Las lluvias torrenciales, que causan daños por un millón de dólares diarios al turismo, han arrasado 9.000 extensiones de tierras agrícolas y causado el derrumbe de dos torres de alta tensión que han dejado sin electricidad a diversas zonas de Cuzco, declarado ayer en estado de emergencia por 60 días.
Hasta el momento también se han registrado 1.332 damnificados y 12.167 afectados como consecuencia de las lluvias en las regiones de Cuzco y en la de Apurímac, las más intensas en los últimos 15 años, según el Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).
Mientras los ojos se vuelcan hacia los turistas extranjeros, miles de lugareños de diversas zonas rurales del sur de Perú -entre ellas la región de Puno, donde se han reportado tres muertos- claman ayuda porque se han quedado sin alimentos, aislados y con sus viviendas inundadas.
La situación tiende a empeorar: el director de Meteorología del Sistema Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), Jorge Chira, explicó a EFE que está previsto que las lluvias sigan presentes en Cuzco por lo menos hasta el próximo viernes.