Mel Gibson pagará 750.000 dólares en los próximos cinco años a su expareja, la rusa Oksana Grigorieva, madre de la hija pequeña del actor, para poner punto y final al litigio que les enfrenta en los tribunales desde hace meses, informó hoy la prensa local.
Esa es una las partes del acuerdo alcanzado hoy por ambos en una vista judicial celebrada en Los Ángeles (California), por el que el intérprete permitirá que Grigorieva y la hija de ambos, Lucía, residan en una mansión propiedad de Gibson en la zona de Sherman Oaks.
Grigorieva recibirá esa cantidad en tres plazos, el último en enero de 2016. Gibson y ella tendrán la custodia compartida de su hija.
Cuando la niña alcance la mayoría de edad, la casa deberá ser vendida y los ingresos que se obtengan por ella irán a parar a un fondo a su nombre, dijo el juez Peter Lichtman.
Lichtman añadió que bajo el acuerdo queda prohibido que cualquiera de las partes publique un libro que incluya asuntos relacionados con este litigio o detalles sobre su relación sentimental.
«Gracias, señoría, por dar a este caso una conclusión razonable», dijo hoy Gibson, de 55 años, ante el juez.
Gibson decidió en marzo no impugnar los cargos tras ser acusado de un delito menor por una agresión a Grigorieva, y se benefició de un acuerdo extrajudicial por el que quedaba en libertad condicional no supervisada durante un periodo de tres años.
El actor aún está en proceso de completar un curso de orientación psicológica de 52 semanas para controlar sus ataques de ira.
Los detectives del caso también investigaron si Grigorieva trató de extorsionar al actor con la grabación y posterior publicación de unas amenazas telefónicas, aunque finalmente no se presentaron cargos.
Grigorieva denunció una supuesta agresión de Gibson, en su residencia de Malibu, en enero de 2010. El actor admitió haberla abofeteado para evitar que le hiciera daño a su hija Lucía mientras discutían.