Paul McCartney murió el 9 de noviembre de 1966, y fue reemplazado en The Beatles -para evitar un suicidio masivo de sus fans- por el bajista canadiense Billy Shears, ganador por aquella época del concurso ‘El doble de Paul McCartney’.
Así lo afirma un documento que va a ser difundido por WikiLeaks, que confirma que todo fue una maniobra montada por Scotland Yard, y donde tanto John Lennon, George Harrison y Ringo Starr fueron cómplices:
«Un documento secreto de la policía británica, Scotland Yard, de 1966 confirma la muerte del beatle Paul McCartney. Se trata de un acta de defunción fechada el 9 de noviembre de 1966, donde el notario Edward Wallance y el jefe de policía de la época, Jills Templeton, dan fe del trágico acontecimiento.
Se detalla que la muerte es debida a un accidente de coche en el que McCartney es arrollado por un camión en el cruce entre las calles de Abbey Road y Belsize Road, en el norte de Londres.
Gracias a Wikileaks se ha dado a conocer el cable que va a cambiar para siempre la historia del rock y al que han tenido acceso diversos medios internacionales, entre ellos Music News Television».
DECLARACIONES DE LENNON
Según se hace eco ‘Excelsior’, el documento recoge también las primeras declaraciones de John Lennon a la BBC horas después del suceso, donde lamenta ‘profundamente’ la muerte de su compañero de grupo y amigo al mismo tiempo anuncia que The Beatles seguirán con su carrera discográfica a pesar de que tendrán que ‘replantearse el seguir dando conciertos'».
Estas declaraciones fueron archivadas en la cadena por orden del manager de la banda Brian Epstein. Jamás salieron en antena.
VIVE Y DEJA MORIR (LEYENDAS URBANAS)
Tal y como lo sentencia su canción Live And Let Die (Vive y deja morir), toda una declaración de principios contra quienes creen en la existencia de un complot, McCartney ha sido blanco de muchas leyendas urbanas que van de lo cómico a lo ridículo, como que perdiera literalmente la cabeza en aquel accidente con él como peatón.
Según una investigación mostrada en el vídeo en DVD, Paul McCartney Really Is Dead: The Last Testament Of George Harrison, la idea de sustituir a McCartney fue orquestada por el Servicio Secreto Británico para evitar una serie de suicidios colectivos mundiales, con la complicidad de John, George y Ringo, quienes hasta fueron amenazados por la inteligencia británica, para ocultar el secreto.
En dicho vídeo George Harrison señala temeroso de que pudieran asesinarlo como aparentemente le sucedió a su compañero y amigo John Lennon, quien según Harrison, iba a revelar la verdad semanas antes de que fuera privado de la vida, y que de acuerdo con el documental estaba obsesionado por dejar pistas de la muerte de Paul.
PORTADA DE ABBEY ROAD
En la portada del álbum Abbey Road se especula la idea oculta de un cortejo fúnebre, presidido por Lennon como predicador; Ringo, el doliente; George, el sepulturero y con un Paul descalzo y descoordinado con respecto a sus demás compañeros.