Falleció en una emboscada tras ser delatado por una vendedora a la que había comprado comida unas horas antes
La historia de Francisco González Rebollo es fascinante, y de ella nos da cuenta Carlos Hidalgo en ‘ABC’.
Apenas tenía 24 años cuando murió abatido a tiros por la antigua Guardia Civil en los Montes de Toledo. Hasta allí había llegado semanas antes tras protagonizar una de las fugas más peculiares que se recuerdan de la posguerra.
Encarcelado en la antigua Prisión de Yeserías de Madrid, estaba condenado a muerte. Pero el día anterior a su ejecución se las apañó para escapar, metido en un ataúd.
MUERTO EN UNA EMBOSCADA
Este miércoles 29 de abril de 2015 se cumplieron 75 años de su muerte, junto a otro maquis llamado Julián Muñoz, en una emboscada tras ser delatado por una vendedora a la que había comprado comida unas horas antes.
El célebre guerrillero José Manzanero, a cuyo grupo se acababa de unir, recordaba con cariño en sus memorias que a «El Rebollo», como era apodado, lo mataron «por glotón».
Francisco González Rebollo, natural de Freguenal de la Sierra, (Badajoz), era militante del PCE. Fue teniente de Artillería durante la Guerra Civil y formaba parte de la batería que hundió el buque Castillo de Olite durante la sublevación casadista en Cartagena. Al final de la guerra cayó prisionero, cuando su hijo apenas tenía unos meses.
Esa detención también fue de película. Cuando la Guardia Civil irrumpió en su casa de la zona de Atocha, escapó por los tejados, saltando de azotea en azotea, en dirección a la estación.
El Foro por la Memoria de Guadalajara ha localizado su lugar de enterramiento y realizará en breve un homenaje a los dos republicanos. Carmen González, sobrina de Francisco González Rebollo, así como su padre Manuel González, hermano de la víctima, acudieron expresamente desde Sevilla para localizar sus restos. Estaban enterrados extramuros del cementerio de un pequeño pueblo.