Rodeada de rayas y tiburones de punta negra, y con un minúsculo bikini. Así lució la arriesgada modelo rusa Irina Shayk, en una sesión fotográfica realizada en Tahí para la revista ‘Sports Illustrated’.
La despampanante joven de 30 años y medidas de 86-58-88 , aceptó posar con las mantas para conmemorar sus décima aparición en la citada publicación.
«Fue un poco peligroso porque tenía miedo de que un tiburón mordiera mi trasero, o dejarme sin traje de baño»,
destacó Shayk.