Luego de la aseveración hecha por Einstein de que «Dios no juega a los dados», ymuchos pensaron que era religioso. sin embargo, una de sus cartas puede alcanzar 1,5 millones de dólares en una subasta insiste en que Dios no es sino «el producto de la debilidad humana».(Confirman por primera vez la Teoría de la Relatividad de Einstein cerca de agujero negro supermasivo)
La carta está en alemán y fue redactada desde Princeton, Nueva Jersey, en 1954. La dirigió al filósofo judío alemán Eric Gutkind, en respuesta a su libro Escoger la vida: la llamada bíblica a la rebelión.
La palabra Dios no es para mí nada sino la expresión y el producto de la debilidad humana, la Biblia es una colección de leyendas venerables pero aún bastante primitivas
La carta de una página y media será subastada por Christie’s en Nueva York el 4 de diciembre. Su valor es estimado en entre 1 y 1,5 millón de dólares.
Antes fue comprada por un coleccionista anónimo por 400 mil dólares en 2008, dijo Christie’s. «Es una de las declaraciones definitivas en el debate de ciencia versus religión», dijo Peter Klarnet, experto en libros y manuscritos en la casa de subastas.(¿Sabías que si usas un avatar de Albert Einstein ya te vuelves más inteligente?)
Einstein huyó de Alemania a Estados Unidos a los 54 años, tras la llegada de Adolf Hitler al poder. Y aún siendo hijo de judíos askenazí, en su carta asegura que el judaísmo no es superior a otras religiones y que los judíos no son el pueblo elegido.
«Para mí la religión judía no adulterada es, como todas las otras religiones, una encarnación de la superstición primitiva», sostenía Einstein en la misiva a Gutkind.
«Y el pueblo judío al que con mucho gusto pertenezco, y en cuya mentalidad me siento profundamente anclado, aun para mí no tiene ningún tipo de dignidad diferente de los otros pueblos», dijo el físico, que además de ser alemán obtuvo las nacionalidades suiza, austriaca y estadounidense.(Tres estrellas lejanas confirman otra vez que Einstein tenía razón )
En mi experiencia, no son de hecho mejores que otros grupos humanos, incluso si están protegidos de los peores excesos por una falta de poder. De otra forma no puedo percibir nada ‘elegido’ sobre ellos.
La carta ya ha sido exhibida en Shanghái y el público podrá verla en Nueva York del 30 de noviembre al 3 de diciembre.