El Universidad de Chile viajó hoy a la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra, donde el próximo martes se enfrentará al Oriente Petrolero en el partido de vuelta por la primera fase de la Copa Sudamericana, con dos bajas y la obligación de ganar con holgura.
Antes de la partida, el entrenador del equipo chileno, el uruguayo Gerardo Pelusso, recalcó la importancia del partido, «de vida o muerte» tras haber empatado 2-2 en el partido de ida, disputado en la ciudad de Rancagua el pasado 24 de agosto.
«Este campeonato tiene eliminatorias muy particulares, desde el comienzo es a matar o morir,», dijo Pelusso, que admitió que el resultado del primer partido no fue bueno para su equipo.
«El resultado que obtuvimos aquí no es el mejor, pero hay que ir a tratar de clasificar allá», dijo el técnico charrúa, que debió dejar en Santiago al volante Manuel Iturra, por lesión, y al lateral Eugenio Mena, que viajó a Europa tras ser convocado a la selección de Chile que jugará un amistoso contra Ucrania, el 7 de septiembre en Kiev.
En la línea del técnico, los jugadores coincidieron en que tratarán de superar la valla del Oriente Petrolero para seguir en la Copa, admitiendo que el encuentro será difícil.
El equipo universitario viajó tras haber derrotado en la agonía, por 1-0, al Santiago Wanderers en la vigésimo segunda jornada del torneo local, con lo que se mantiene tercero en la clasificación, con 45 puntos, pero con un partido menos.
De acuerdo a lo ocurrido en aquel partido y aunque el técnico Pelusso no ha adelantado nada, la ‘U’ podría comenzar en Santa Cruz con Miguel Pinto; Matías Rodríguez, Mauricio Victorino, Juan Abarca, José Rojas; Felipe Seymour, Nelson Pinto, Emanuel Centurión, Edson Puch; Diego Rivarola y Carlos Bueno.