Próxima a cumplir seis meses frente a la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Ana Gabriela Guevara Espinoza, exatleta mexicana y campeona mundial, recorre la nación informando en actos públicos sus políticas sociales y reclamando a la ciudadanía «deshacer las malas prácticas del pasado». Sin embargo, desde su nueva etapa, la exvelocista ha sido señalada de usar como «caja chica» el organismo que encabeza.
De acuerdo a una investigación de la revista Proceso, de diciembre a la actual fecha, la Conade contrató a tres empresas, que ofrecen servicios de boletos de avión, hospedaje, transportación terrestre e hidratación para los atletas, utilizadas para triangular los recursos públicos del Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento (Fodepar) y fincar con sobreprecios los viajes a campamentos y competencias. Para dicho modus operandi, las federaciones deportivas que solicitan el dinero a la Conade con apenas unos días de anticipación antes de un evento deportivo, lo cual evita la revisión del presupuesto solicitado.
Los responsables de revisar los presupuestos que presentan las federaciones son los metodólogos, un grupo de especialistas en los distintos tipos de deportes, que tienen la facultad de revisar la viabilidad técnica del evento deportivo que se solicita y también que los presupuestos se apeguen al bueno uso y ejercicio de los recursos públicos. Dicho grupo de especialista fue desaparecido por Guevara bajo el argumento de que «son un tronco» que impedía el diálogo entre los atletas y la federación.
Las compañías acusadas de inflar el costo de los eventos deportivos son Édgar García Morales y Asociados S. de R.L; una arrendadora de vehículos, Proyectos Científicos y Tecnológicos del Sur y Volare Travel Shop S.A de C.V. Un ejemplo de cómo se desvían los recursos y se inflan los precios es la Federación Mexicana de Taekwondo, que preside Raymundo González. El 23 de abril presentó su programa de actividades 2019: 55 eventos que constarán de 67. 6 millones de pesos. Entre 2017 y 2018 su presupuesto no rebasó los 27 millones de pesos anuales.
También, González solicitó 4.1 millones de pesos para la nómina de tres entrenadores, seis auxiliares, su director técnico y 5 millones para comprar petro electrónicos y equipamento deportivo. Lo que ocurre en el taekwondo se replica en otras federaciones. En el tiro deportivo, por ejemplo, la empresa Édgar Gacía Morales y Asociados, financió la gira de siete deportistas nacionales. En total, del Fodepar se le reembolsó 1 millón 540 mil pesos a esta empresa de arrendamiento de autos que se hizo cargo del hospedaje, la alimentación y los boletos de avión, que costaron 59 mil 266 pesos.
Éste dinero se probó del Fodepar mediante la metodóloga Sofía García, quien en total recibió en su cuenta bancaria un depósito de 4.9 millones de pesos. García fue despedida el pasado 2 de mayo. Según Proceso, en el primer trimestre las federaciones han realizado al rededor de unos 190 eventos deportivos por un monto de 91 millones de pesos.
Entre los beneficiados se encuentra Juan Pedro Toledo, el exvelocista sonorense, contemporáneo a Guevara, quien funge como el responsable del deporte adaptado; Luz María Chávez, quien tiene una beca de 35 mil pesos por ser la supuesta entrenadora de la nadadora, Liliana Ibáñez. El exvelocista, Rodolfo Ugalde, quien ingresó como metadólogo de atletismo. Éste fue invitado por Israel Benítez, y no se presenta a la oficina porque, según detalló, su labor la realiza en el campo.