El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ha abogado desde su blog por extender el Estado del Bienestar a los países emergentes por «razones sociales, de dignidad humana y de eficacia competitiva».
Y es que, en su opinión, es necesario redefinir el Estado del Bienestar «para garantizar, bajo las nuevas fórmulas que sean precisas, su existencia y extensión geográfica». «No es Occidente el que ha de evolucionar hacia la desprotección social, sino los países emergentes los que deben converger con nosotros», ha escrito tras subrayar que el Estado social «no tendrá futuro si a largo plazo no se extiende a los países emergentes», ya que «es obvio que Europa no podrá competir en costes con esas economías».
El primer edil defiende desde su bitácora el reto de preservar los logros principales del que ha calificado como un elemento «hasta ahora medular», el Estado del Bienestar. «Habrá que estudiar el modo: bien salvándolo de las amenazas que lo acechan –si es que eso es posible–, bien redefiniéndolo en el caso de que no sea operativo, o bien cumpliendo sus objetivos mediante una fórmula nueva, aquella que se muestre más eficaz una vez realizados los cambios necesarios», ha indicado.
Todo ello para insistir en que resultaría «ingenuo» además de «peligroso» pensar que «ese gran pacto que ha procurado a Europa los 65 años de mayor paz y prosperidad de la Historia puede disolverse ahora». En ese punto ha sostenido que urge «encontrar el modo de que siga funcionando algo que no es un simple mecanismo de gestión, sino un auténtico pilar del sistema de convivencia».
En su blog, Alberto Ruiz-Gallardón ha señalado que el Estado del Bienestar, «aun con el riesgo de restar dinamismo a las sociedades, ha sido un fabuloso logro histórico, que ha proporcionado no sólo estabilidad social y política, sino también la consecuencia económica de ésta, una economía de mercado basada en el consumo masivo y asentada en las clases medias, que ha elevado los niveles de vida hasta extremos inimaginables antes de la Segunda Guerra Mundial».
Así, el regidor ha destacado las consecuencias positivas del Estado del Bienestar, motivos más que suficientes para que Estados Unidos «haya decidido seguir el mismo camino que Europa, algo verdaderamente inusual, y esté avanzando hacia la cobertura sanitaria universal». «Soy consciente de las dificultades y la polémica que rodean a esa iniciativa del presidente (de los Estados Unidos, Barack) Obama, pero estoy seguro también de que es un paso histórico sin marcha atrás», ha escrito.