La Federación Internacional de Sociedades Nacionales de la Cruz Roja y la Media Luna Roja (FICR) anunció hoy que aumentará a diez millones de euros su llamamiento de fondos para socorrer a las víctimas del terremoto de Chile, que continúan necesitando alojamiento y servicios de salud.
El seísmo, de magnitud 8,8, tuvo lugar el pasado 27 de febrero, poco más de un mes después del terremoto de Haití, y desencadenó un tsunami que mató a más de 500 personas y afectó a casi dos millones.
«Debemos hacer todo lo que podamos para evitar que las personas caigan en la pobreza y asegurar que las familias tengan acceso a una vida digna y a servicios de salud en las regiones en que los hospitales han sido severamente dañados, hasta que estos puedan ser reparados o reconstruidos», explicó Gustavo Ramírez, representante regional de la FICR.
Ramírez añadió que «garantizar alojamiento temporal para las decenas de miles de personas damnificadas sigue siendo una prioridad, especialmente en las áreas rurales».
Hasta ahora, más de 22.000 familias han recibido material de alojamiento temporal (tiendas o lonas de plástico reforzado) y otras 750 han sido beneficiadas con materiales de construcción para reparar sus casas.
Adicionalmente, unas 280 familias han recibido tarjetas de débito no transferibles para comprar materiales y herramientas de construcción por un monto de 200 dólares (unos 150 euros) en cualquier ferretería de la red establecida por este programa.
El nuevo llamamiento de la FICR también servirá para financiar cuidados de salud para 10.000 familias durante dos años, servicios de salud preventivos para al menos 90.000 personas y servicios de agua y saneamiento para hasta 10.000 damnificados.
SAVE THE CHILDREN
Por otro lado, Save the Children ha proporcionado ayuda directa a 11.842 niños seis meses después del terremoto de Chile y recordó que, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el 90% de los niños presentaron síntomas de sufrimiento psicológico tras el seísmo.
En los últimos seis meses, Save the Children ha establecido 21 espacios seguros para que los niños puedan jugar en un entorno seguro, relacionarse con otros menores e iniciar el proceso de recuperación mientras sus padres se ocupan de cubrir las necesidades básicas de la familia.
Más de 1.800 niños chilenos se han beneficiado de las actividades de estos espacios creados por Save the Children, que, además, ha proporcionado formación sobre el manejo del estrés infantil a 334 maestros de 10 escuelas y 37 centros de las zonas rurales y urbanas de Chanco, Pelluhue y Cauquenes.