El Gobierno mexicano se ha puesto en contacto con las principales aerolíneas del país, Aeroméxico, Volaris e Interjet, para reubicar a los pasajeros afectados por el cierre de Mexicana de Aviación, que suspendió sus operaciones el pasado sábado después de que Tenedora K, el grupo de inversores que compró el 95% de la compañía, negara la inyección necesaria para evitar la quiebra de la aerolínea.
En un comunicado, la Secretaría de Turismo de México (Sectur) informó de que con el fin de atender a los turistas y usuarios afectados por la suspensión de Mexicana, y de sus filiales Link y Click, ha desplegado a personal de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) para atender las quejas de los viajeros, para lo que ha habilitado un número de teléfono (078).
Asimismo, de forma coordinada con la Secretaría de Comunicaciones y Transporte, ha solicitado a las citadas aerolíneas que aumenten sus frecuencias para atender a los pasajeros de Mexicana que tenían previsto volar en rutas internacionales.
En este sentido, indicó que ha contactado ya con aerolíneas nacionales, internacionales y operadores de vuelos charters para solicitar el aumento de frecuencias y rutas a México para atender la demanda hacia el país hasta que la situación se normalice.
Sectur reiteró su compromiso con los visitantes nacionales y extranjeros que visitan el país y pidió al resto de los actores de la industria turística mexicana que trabajen «en estrecho contacto» para sumar apoyos y minimizar en lo posible el número de afectados por la suspensión de Mexicana.
Por su parte, las aerolíneas Aeroméxico e Interjet anunciaron la aplicación de tarifas especiales para los pasajeros varados de Mexicana que no han podido tomar su vuelo.
8.000 EMPLEOS EN JUEGO.
Tenedora K decidió retirarse el pasado viernes del plan para rescatar la compañía, después de haber invertido cerca de 13 millones de dólares (10,2 millones de euros) en la última semana para mantener las operaciones de la aerolínea, que suspendió sus operaciones el sábado.
A la espera del plan de rescate, la compañía había reducido en las últimas semanas progresivamente sus 420 operaciones diarias, incluida su ruta desde Madrid, a 120 vuelos.
Los inversores no lograron obtener las condiciones de liquidez para seguir funcionando, por lo que propusieron un plan de rescate que implicaba el despido de 1.360 sobrecargos –el 100% de la plantilla– quienes serían indemnizados, como si estuviera ya en quiebra para pasar 300 a una de sus filiales, propuesta que el Gobierno, acreedor y mediador entre trabajadores y propietarios, rechazó por considerarla «totalmente inaceptable».
Los nuevos propietarios, que debían presentar el plan de reestructuración en diez días, ya habían advertido de que el impacto de los costes laborales en la situación financiera y competitiva de la compañía «era más grave de lo que se contemplaba».
Los pilotos y sobrecargos habían aceptado reducir su salario para darle tiempo a la empresa a su reestructuración. En total, Mexicana, incluidas sus dos filiales, emplea a 8.000 trabajadores.
Mexicana de Aviación, creada hace 98 años era la segunda aerolínea del país y transportaba 22.000 pasajeros diariamente. Cubría desde México rutas diarias nacionales e internacionales hacia Centroamérica, Sudamérica, el Caribe, Estados Unidos, Canadá y Europa, entre ellas, Londres y Madrid.
Según la prensa local, un nuevo grupo de inversores, ligado al grupo financiero IXE, que preside Enrique Castillo y cuyo director general y socio de la corporación es Javier Molinar, hermano del secretario de Comunicaciones y Transportes del Gobierno mexicano, podría interesarse por el grupo Mexicana.
AVISAN DE QUE SUBIRAN LOS PRECIOS.
Analistas consultados por periódico ‘El Universal’ advierten que el cierre de las operaciones de Mexicana supondrá, además de la cancelación de rutas difícilmente recuperables por otra aerolínea, el incremento de los precios por las plazas disponibles.
«Si en una ruta había 750 plazas y 500 eran de Mexicana, habrá una mayor demanda por esos 250 asientos, con lo que es probable que las tarifas se incrementen», señalan. En la misma línea, consideran que recuperar las rutas que operaba Mexicana con 115 aviones, será difícil para compañáis como Aeroméxico o Volaris, que disponen de entre 21 y 24 aviones operativos.