La policía de Málaga ha encontrado un documento que demuestra que una mujer rumana de 46 años, que permanece detenida desde noviembre de 2011, firmó un contrato para ceder a sus dos hijas menores de edad a una organización de proxenetas.
Los hechos se conocieron por una denuncia de las niñas en comisaría, lo que permitió desmantelar dos grupos dedicados a la explotación sexual de mujeres y detener a 19 personas, entre ellas a la madre.
En el papel hallado ahora, firmado en Rumanía, declara «por propia responsabilidad y sin que nadie la fuerce» que ha llegado a un acuerdo para que sus hijas vayan a España a ejercer la prostitución y argumenta que no puede mantenerlas.
La madre, una facinerosa sin escrúpulos, cobró 5.000 euros por ello.