Los mensajes de socorro estaban impresos en el reverso de los tapones, donde normalmente suelen aparecer datos como la fecha de caducidad. Esto hizo pensar a los clientes que estas peticiones de auxilio podían proceder de los trabajadores de la línea de producción de la marca.
Afortunadamente, este caso no resultó ser el de un trabajador explotado que suplicaba por su liberación como pensaron muchos consumidores. Al parecer, esta marca suele imprimir mensajes en sus botellas en bastantes ocasiones, como informa el portal BuzzFeed, pero esta vez, y dados los casos conocidos de trabajadores explotados que trabajan en pésimas condiciones, saltó la alarma entre los clientes.
Cuando la marca se dio cuenta de lo que estaba sucediendo, publicó en su página de Facebook un mensaje dando explicaciones y pidiendo perdón por la confusión.
«Hola, sentimos que el mensaje os haya preocupado, esa no era nuestra intención. Queríamos dar a nuestros clientes una sonrisa y un momento para pensar mientras bebían su bebida favorita.
Estamos planeando quitar los mensajes, pero esto puede llevar un tiempo por el stock que hay en el mercado».
A pesar de esto, muchos clientes sigue quejándose por lo que consideran una mala campaña de marketing o porque aún no saben que los mensajes no eran reales.
Estas son algunas de las publicaciones en el muro de la página de Facebook de Sobe donde los clientes se quejan o muestran su preocupación por la campaña.