El colapso político, económico y social de los últimos años ha hundido a Venezuela en la clasificación regional y, según los datos y estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), es ya uno de los más pobres de Latinoamérica en términos de producto interno bruto (PIB) por habitante. (El FMI compara a Venezuela con una economía en Guerra Civil: Prevé una caída del 25% del PIB)
El descenso se ha agudizado en los últimos años. De 2015 a 2019, en solo cuatro años, Venezuela ha retrocedido 18 posiciones en la clasificación de economías de Latinoamérica y el Caribe. Su PIB por habitante en dólares es ya el cuarto más bajo de las 30 economías que recoge el Fondo, solo por delante de Honduras, Nicaragua y Haití. Cuba no pertenece al organismo. (Mitzy Capriles de Ledezma: Venezuela para Dionisio García Carnero)
Venezuela fue durante décadas el país más rico de Latinoamérica. En términos de renta per capita llegó incluso a situarse entre los cinco primeros del mundo tras los estragos causados en Europa por la Segunda Guerra Mundial. Después, gracias a sus enormes riquezas naturales y, en particular, a sus exportaciones de petróleo, se mantuvo a la cabeza de Latinoamérica entre los grandes países.
Actualmente, El Salvador, Guatemala, Bolivia o la vecina Guyana, tradicionalmente mucho más pobres, superan a Venezuela. Colombia, que durante décadas fue fuente de emigración a Venezuela, tendrá este año un PIB por habitante que duplica al venezolano.