El Gobierno de Evo Morales aseguró hoy que logró el apoyo expreso de diez países miembros de la OEA respecto a la demanda de recuperar su salida al mar, que perdió en la guerra del Pacífico librada contra Chile a fines del siglo XIX.
La cancillería boliviana destacó en un comunicado la «solidaridad expresamente manifestada» por los representantes de «Perú, San Vicente y las Granadinas, Brasil, México, Ecuador, Argentina, Uruguay, Venezuela, Panamá y El Salvador», durante la XL Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) celebrada la semana pasada en Lima.
Según la nota, estos países y «el plenario de ministros de Relaciones Exteriores» asistentes a la asamblea manifestaron su apoyo para que «pueda encontrarse una solución al problema marítimo de Bolivia», tras la presentación del informe sobre esta disputa, a cargo del canciller David Choquehuanca.
El ministerio de Relaciones Exteriores respondió así a la denuncia del diputado opositor Franz Choque, de Plan Progreso para Bolivia-Convergencia Nacional (PPB-CN), quien dijo a los medios que el Estado boliviano «ha omitido incluir en la agenda de demandas regionales» la reivindicación marítima.
Bolivia y Chile no tienen relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1962, salvo un paréntesis entre 1975 y 1978, debido a la falta de una solución a la demanda marítima boliviana.
En 2006, los Gobiernos de Michelle Bachelet (2006-2010), de Chile, y de Evo Morales establecieron una agenda común de trece puntos, en la que por primera vez se incluyó el tema marítimo y que desde entonces permitió avanzar en diversos aspectos hacia una mayor integración.
Choquehuanca manifestó en Lima la intención de que en la próxima reunión de julio entre los vicecancilleres de Bolivia y Chile se establezca «una hoja de ruta» para las negociaciones y «para diseñar una agenda» en este tema.