Varios de los canallas tenían todavía en su poder teléfonos móviles de las españolas
El procurador (fiscal) general de México, Jesús Murillo Karam, ha anunciado este 13 de febrero de 2013 que hay seis detenidos «totalmente confesos» por la violación de seis turistas españolas en Acapulco el pasado 4 de febrero.
«Existen evidencias plenas de su participación en las violaciones, vejaciones sexuales y robos; los arrestados han confesado y hecho un relato pleno de lo que sucedió».
Murillo Karam ha asegurado que considera el caso «resuelto» a pesar de que resta otro delincuenta, ya identificado, pero aún sin detener.
El procurador aseguró que los arrestos se realizaron «después de una investigación muy seria» realizada entre los tres niveles de Gobierno.
Los detenidos tienen edades de entre 16 y 30 años y, según el inspector general de la Policía Ministerial federal, Vidal Díaz, «se han recabado pruebas físicas y periciales que acreditan sin lugar a dudas su participación».
A eso se suman los testimonios de las víctimas. Las españolas han identificado sin margen de duda a varios de sus atacantes, en las ruedas policiales organizadas en la capital.
También ha encontrado la policia algunos de los objetos que fueron robados a los agredidos, como los teléfonos móviles.
Una de las detenciones se produjo la tarde del martes y las cinco restantes en la madrugada de este miércoles, por lo que quedó descartada cualquier vinculación a este caso de otras personas arrestadas durante el fin de semana pasado.
Este caso «está resuelto, pero no es el único», apuntó Murillo Karam, tras señalar que la nueva estrategia es no divulgar la primera detención, sino continuar la investigación hasta que esté culminada y haya plena «certeza» de lo sucedido.
La semana pasada, el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, ofreció «todo el apoyo institucional» para resolver el caso.
La Cámara de Diputados mexicana creó una comisión especial para investigar el ataque en Acapulco, una de las ciudades que más está sufriendo la violencia derivada de la lucha entre los distintos cárteles de la droga.
Las seis víctimas, en compañía de otros seis amigos también españoles y una mexicana, alquilaron un bungalow en Playa Diamante, una zona muy turística de la ciudad.
Residentes la mayoría en México y con edades que rondan los 30 años habían ido a pasar allí el puente que con motivo del aniversario de la Constitución mexicana se celebraba ese fin de semana.
En la madrugada del lunes 4 de febrero fueron asaltados por un grupo de individuos armados y con el rostro cubierto por pasamontañas.
Los hombres fueron atados y golpeados y las seis españolas agredidas sexualmente, por turnos y con todo tipo de vajaciones. La mexicana resultó ilesa.
La pesadilla duró más de dos horas y media. Ninguno de ellos ha querido realizar declaraciones.
