Al menos doce refugiados sirios, de los que cinco eran niños, han muerto ahogados durante la madrugada del miércoles 2 de septiembre de 2015 al intentar alcanzar la isla griega de Kos desde la costa de Turquía en dos barcas, informa el diario turco «Hürriyet» en su edición digital.
Sin embargo, una imagen ha saltado de lleno a las redes sociales por su crudeza y como símbolo de la última gran crisis migratoria que está viviendo Europa. En una de las fotografías que han circulado aparece un niño boca abajo en la orilla, ahogado, según describe la agencia DHA. Tenía 3 años y se llamaba Aylan Jurdi, nacido en Kobane.
Fue rescatado por un policía que lo llevó en brazos tratando de ocultar su rostro, pero no pudo evitar que se hiciera viral pocos minutos después.
Así, el hashtag #KıyıyaVuranİnsanlik (la humanidad ha naufragado, en turco) se convirtió en uno de los temas más comentados del día en Twitter.
Los dos barcos, con un total de 23 personas a bordo, habían partido por separado de la zona de Akyarlar de la península de Bodrum, dijo un funcionario naval turco de alto nivel.
Una de las lanchas salió de Aspat, cerca de Bodrum, en el suroeste de Turquía, con 16 refugiados sirios a bordo, y se hundió antes de alcanzar la isla de Kos. Según los primeros datos, al menos ocho refugiados murieron en el accidente. La guardia costera turca pudo rescatar a cuatro personas con vida y sigue buscando a cinco desaparecidos.
En la misma zona se hundió otra barca que había partido de Alihoca, también cerca de Bodrum, con seis personas a bordo, de las que cuatro -una mujer y tres niños- murieron. Las otras dos personas lograron alcanzar la costa gracias a que llevaban chalecos salvavidas.
Entre enero y julio, las patrullas turcas salvaron a 20.165 refugiados indocumentados en 629 operaciones en las aguas turcas del Egeo, y detuvieron a 42 personas por tráfico ilícito de personas.
Los refugiados suelen pagar entre 900 y 1.200 euros para una plaza en una lancha neumática que los lleve a una de las cercanas islas griegas, pero los naufragios son frecuentes porque a los traficantes «les da igual si se mueren o no», según han afirmado a personas que han realizado este viaje.