Le han cascado una multa de aúpa por tener dos loros muy ruidosos. Y no es que profieran insultos a todo pasto como suele ser habitual en este tipo de casos, sino todo lo contrario: son tan educados que no pueden evitar saludar a todo aquel que pasa frente a su ventana.
Su propietaria es una vecina de Avalon, New Jersey, que de momento deberá encontrar la forma de hacer que cierren el pico.
QUEJAS
Elaine Scattergood fue multada en mayo después de que alguien se quejara de que sus loros, Edmund y Arthur, eran demasiado ruidosos, según da cuenta ‘The Press of Atlantic City‘.
Señaló que colocaba a los loros en la entrada de su hogar porque a la gente le gustaba.
Agregó que las personas saludaban a las aves y que los loros contestaban con un saludo.
Un juez le dijo a Scattergood que se desestimará la denuncia del ruido si no se reportan más quejas en los próximos 90 días.