Poco importa el lugar exacto donde tuvo lugar el suceso, ya que las imágenes dan cuenta de cómo se las gastan algunos brasileños que prefieren tomarse la justicia por su mano.
El ratero de tres al cuarto fue sorprendido robando en un garaje, y el propietario, con sus zapatones tipo militar, le dio lo suyo y más, hasta matarlo, -según informan algunos medios locales-.
Al principio trata de pegarle con un garrote pero, al caérsele, opta por los puñetazos y las consabidas ‘coces’.
La grabación se corta justo en el momento en que se dispone a propinarle la ‘patada de gracia’.