Las tienen en completa oscuridad, enterradas vivas en minúsculas mazmorras construidas en el desierto sirio, y de vez en cuando las sacan para pegarlas y violarlas.
Son las mujeres yazidíes en manos de los salvajes del ISIS, según una investigación realizada por la cadena ‘Sky News’.
Según da cuenta a su vez ‘The Mirror‘, no se sabe qué ha sucedido con las prisioneras que permanecían en los tenebrosos calabozos del grupo terrorista.
Algunas cautivas del Estado Islámico que lograron escapar de las garras de los yihadistas, han relatado en más de una oportunidad las atrocidades a las que eran expuestas.
La mayoría sufría golpes y violaciones por parte de los terroristas, mientras que otras eran obligadas a casarse con líderes del grupo yihadista.