El británico Josh Reed, de 1,90 metros de estatura con extensa barba pasó tranquilamente el control de pasaportes en el aeropuerto londinense de Stansted y arribó sin incidentes al aeropuerto de Dortmund, Alemania.
Hasta aquí todo parece normal, salvo un pequeño detalle: en el aeropuerto alemán Reed se dio cuenta de que pudo hacer la travesía y llegar a territorio Schengen con el pasaporte de su novia, Sophie Watkins, de 1,57 metros, y embarazada de siete meses.
«Ello hace pensar en lo fácil que es para las personas que se parecen [a fotos en pasaportes] conseguir pasar (controles) con pasaportes falsos,»
dijo Reed al diario ‘The Sun‘.
Al llegar a Alemania Reed atravesó los controles del aeropuerto de Dortmund presentando su carnet de conducir.