El presidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) de Venezuela, el líder opositor Henry Ramos Allup, se felicitó en las últimas horas por el retiro de oficinas legislativas de los últimos retratos del fallecido presidente Hugo Chávez (1999-2013), al proseguir su cruzada contra lo que llama necrolatría.
Ya limpiamos la AN de fetiches necrolátricos y de objetos de brujería. Pronto lo haremos en toda Venezuela. Solo habrá símbolos patrios.
— Henry Ramos Allup (@hramosallup) 9 de abril de 2016
Ramos Allup dio cuenta a través de esa red social del retiro de una gigantesca pancarta con los ojos del extinto gobernante que dominaba la fachada del edificio donde los diputados tienen sus oficinas oficiales en el centro de Caracas.
Previamente, tras tomar posesión en enero como nuevo titular de la AN gracias a la contundente derrota del chavismo en las parlamentarias del pasado 6 de diciembre, Ramos Allup ordenó retirar del hemiciclo principal y entregar «a la viuda y a sus hijas», o arrojarlos a la basura, otros retratos de Chávez.
Ramos Allup también ordenó lo mismo con unos retratos del prócer independentista Simón Bolívar.
Sostuvo que estos eran «falsificados» por haber sido hechos «por computadoras», con base en moldes obtenidos directamente de la calavera del prócer independentista una vez que sus restos fueron exhumados a petición de Chávez.
El jefe parlamentario opositor fue filmado mientras impartía su orden a un grupo de obreros a los que advertía que no quería ver en el Palacio Legislativo sino «el retrato clásico» de Bolívar, y ninguna «propaganda política ni culto a la personalidad» de Chávez.
El presidente del Parlamento venezolano tildó de «parásitos» a los presidentes y primeros ministros que el mes pasado asistieron en Caracas a los homenajes a Chávez por el tercer aniversario de su fallecimiento.
«Esta vez los parásitos internacionales que vinieron para los funerales se irán como vinieron: con las manos vacías porque dólares no hay», declaró entonces el también secretario general del opositor partido Acción Democrática (AD, socialdemócrata).
Ramos Allup arremetió especialmente contra Evo Morales, presidente de Bolivia, país que debe su nombre al prócer caraqueño, quien viajó a Caracas junto a sus colegas de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, y Nicaragua, Daniel Ortega; los primeros ministros de San Vicente y Las Granadinas, Ralph Gonsalves, y Antigua y Barbuda, Gaston Browne, y el vicepresidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel.
«Habrá juicios y cárcel para delincuente Evo Morales cuando abandone la Presidencia. Igual destino tendrán sus compañeros (de) pandilla (de los) otros países», sostuvo Ramos Allup.
El jefe de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la alianza de partidos opositores venezolanos, Jesús Torrealba, achacó a esos actos en honor a Chávez como una expresión de «necrofilia».
«No tenemos tiempo para disputas estériles con los que confunden política con necrofilia», sostuvo Torrealba, quien inicialmente se disculpó en nombre de Ramos Allup y este lo desautorizó.
«Si la manera como eso se ejecutó (el retiro de retratos) hiere alguna sensibilidad, yo le quiero decir a todos esos millones de chavistas que votaron por nosotros el 6 de diciembre que presentamos disculpas si se han sentido heridos», dijo Torrealba.
«Aclaración: cuando deba pedir excusas por algo mal hecho lo haré personalmente. Mientras no lo haga es porque no tengo por qué pedirlas», expresó a su vez Ramos Allup.