Brianne Altice, de 36 años de edad, daba clases de lengua inglesa en el estado norteamericano de Utah, y su sórdida aventura sexual con dos alumnos, de 16 y 17 años respectivamente, le puede salir muy cara.
La mentada, se enfrenta a 30 años de cárcel por el delito de abuso sexual, por unos hechos acaecidos en 2013 y que ahora están siendo juzgados.
En su defensa, acaba de sostenter que nunca estaba en su ánimo el haberles hecho daño, y que «solamente» les tocaba el pene y los masturbaba, -lo que hacía en su casa cuando su marido estaba ausente y en una iglesia cuando no tenía otro sitio a mano-.
Altice agregó que no tiene dinero para pagar un abogado, y que jamás ha recibido queja alguna por parte de las autoridades escolares. Incluso, durante el año que dio clases a los alumnos de los cuales abusó, estos «mejoraron sus calificaciones».