Entraron muy decididos a atracar un establecimiento brasileño, y les dieron lo suyo. Los dos jóvenes, se habían acercado al lugar en una moto robada portando sendas armas de fuego.
Lo que no sabían es que en el interior había un policía militar, que no dudó en sacar su arma nada más verlos. Hubo un intercambio de disparos y los dos ladrones fallecieron en el lugar.
Uno de los ladrones murió encima de la moto cuando intentaba escapar y el otro cayó tendido en el suelo después de salir por la puerta principal.
El policía militar fue alcanzado por uno de los disparos de uno de los ladrones. La bala le impacto en el pecho. El hombre fue llevado en estado crítico al hospital pero murió después de ser ingresado en la unidad de emergencia.
El policía estaba casado y su esposa estaba embarazada. Uno de los sospechosos muertos tenía 18 años y era hijo de un policía militar.