Mientras el autodenominado Estado Islámico acaba de matar a 85 personas en las inmediaciones de la ciudad de Deir al Zur, en el noreste de Siria, durante una ofensiva del grupo terrorista contra zonas controladas por el régimen del presidente sirio, Bachar Al Asad, siguen llegando desde la zona inquietantes vídeos.
Esta vez está grabado en un cementerio cristiano, donde tras matar a un grupo de soldados, las bestias del DAESH han destruido todas las lápidas y tumbas.
En las imágenes aparece un yihadista en muletas, dándose un macabro garbeo por el camposanto.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos apuntó que al menos cincuenta combatientes del EI y 35 efectivos gubernamentales han fallecido en las últimas 48 horas por los bombardeos y enfrentamientos al suroeste de Deir al Zur.
El EI proclamó a finales de junio de 2014 un califato en las zonas bajo su control en Siria e Irak, donde se hizo con partes del norte y el centro de ambos países.
Al mes siguiente, avanzó por la provincia de Deir al Zur, que conquistó casi completamente, excepto algunos distritos de su capital homónima y el aeropuerto militar, en manos del régimen.