Tras atacar durante 2016 un total de 17 países y perpetrar al menos 1.422 asesinatos, las bestias del ISIS quieren celebrar a su manera la llega del año nuevo, y para ello se les ha ocurrido la ‘feliz’ idea de dar un giro a sus ejecuciones.
Así, quizás para pasar del fuego con que fueron abrasados dos turcos en su útima entrega en forma de vídeo, este martes 3 de diciembre de 2016 emplean otro elemento y lanzan a las redes menos convencionales una atroz ejecución, esta vez ‘pasada por agua’. La titulan ‘La procesión de la luz’.
La víctima es un pobre vecino del país, a quien sumergen vestido al estilo Guantánamo en una especie de pecera llena de agua, donde le someten al llamado ‘waterboarding’, o ‘submarino’, la tortura preferida de la CIA. Antes, cómo no, le someten al típico interrogatorio donde le fuerzan a confesar sus ‘pecados’.
Tras agarrarle el verdugo por la cabeza y tenerle un buen rato ahogándose, lo saca en el útimo minuto y le da de beber una especie de licor para que se reanime. Acto seguido, vuelve a meterle dentro y deja que se asfixie mientras abre los ojos como platos de puro espanto.
El vídeo, que dura más 41:27 minutos, incluye otras ejecuciones, aunque las mismas no rizan el rizo como esta, y se limitan a seguir con la tradición: cortar cabezas a destajo.
Como se recordará, el 17 de octubre de 2016, la coalición estadounidense, compuesta por el Ejército iraquí, la Peshmerga kurda, las milicias chiítas, las milicias cristianas y la Guardia Nínive de Turquía, se comprometieron a liberar Mosul, en una cruenta batalla que está en pleno apogeo.
