El pequeño, de 9 años, cuenta en una grabación cómo fue alcanzado en el bombardeo, en el que murió su madre
Se llama Abdul Bassit Al Satouf, tiene nueve años y este jueves 16 de febrero de 2017 perdió las piernas en un ataque con bombas de barril (petróleo, explosivos y acero) en el pequeño pueblo de Al Habit, en la provincia siria de Idlib, situado a 60 kilómetros de Alepo.
El pequeño, que cuenta su tragedia con una asombrosa entereza en un vídeo sobre estas líneas, se encontraba comiendo con su familia cuando comenzó el ataque aéreo, -perpetrado según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos por la aviación del régimen de Bashar al-Asad- y fue alcanzado por uno de los artefactos que cayeron frente a la puerta de su casa.
La bomba mató en el acto -aunque él aún no lo sabe- a su madre. Sacado en volandas por su desesperado padre, con sus muñones sangrando, se queda un momento en el suelo mientras le llama deseperado entre nubes de humo: «¡Baba, cógeme, baba!».
La grabación ha sido distribuida por activistas de la oposición siria en las redes sociales, y pese a lo apuntado, no se ha podido verificar independientemente el origen del ataque. Ni el régimen sirio ni sus medios estatales han hecho así comentario alguno.
Activistas opositores publicaron asimismo una foto del niño siendo tratado en un hospital, donde se recupera satisfactoriamente de sus gravísimas heridas.
El ataque en el poblado de Al Habit fue uno de los diez que azotaron la región sur de Idlib. El OSDH reporta que cinco personas murieron en los mismos, entre ellos una mujer y un niño.
Desde el 2015, Idlib ha estado bajo control de los rebeldes. El cese del fuego requiere que el gobierno sirio detenga las operaciones militares contra cualquiera no relacionado con los yihadistas del ISIS, u otros grupos terroristas, según da cuenta la agencia estatal SANA.