Una nueva sentencia de la Corte Constitucional de Colombia permite que los trabajadores acudan a sus puestos de trabajo borrachos o drogados siempre y cuando su estado no repercuta en la realización correcta de sus tareas y no supongan un peligro para él mismo o para sus compañeros.
La sentencia llega después de una demanda presentada el año pasado por la facultad de Derecho de la Universidad Uniciencia de Bucaramanga, en la que se argumentaba que el artículo 60 del Código del Trabajo, en el que se recoge que «presentarse al trabajo en estado de embriaguez o bajo la influencia de narcóticos o drogas enervantes está prohibido», chocaba con dos principios básicos de la Constitución.
En primer lugar, atentada contra el artículo que establece la igualdad de oportunidades para todos los trabajadores y, en segundo lugar, contra el artículo que defiende la protección del Estado para «aquellas personas que por su condición económica, física o mental se encuentren en circunstancia de debilidad manifiesta», según publica El País.
De este modo, el tribunal colombiano ha reinterpretado la parte del artículo 60 del Código del Trabajo que habla de esta prohibición. La decisión ha causado polémica en el país y las opiniones son divididas. A partir de ahora, sólo habrá consecuencias para aquellos empleados que consuman alcohol o drogas y no cumplan con sus funciones laborales, o supongan un riesgo para ellos mismos o para sus compañeros.
El Ministerio del Trabajo ha pedido mantener la norma original porque considera que «el alcohol y las drogas pueden descontrolar las inhibiciones del individuo, generarle torpeza para coordinar, deteriorar su capacidad de juicio, producir alucinaciones y causar eventuales accidentes», señala la revista Semana.
