Un dron ha grabado los estragos provocados por la inundación en las afueras de la ciudad colombiana de Mocoa, en el departamento meridional de Putumayo. La tragedia ha dejado al menos 254 muertos, más de 200 heridos y unos 400 desaparecidos, según César Urueña, director de Socorro de la Cruz Roja Colombiana, citado por AFP.
«El barrio de San Miguel se desapareció por completo, 16 más han sido afectados», reporta desde el lugar nuestro colaborador Sebastián Agudelo.
Ante la gravedad de la situación, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha llegado a la zona afectada y ha declarado el estado de calamidad pública para agilizar las operaciones de rescate y ayuda.
«Mi corazón, así como los corazones de todos los colombianos están con las víctimas de esta tragedia», ha señalado el mandatario en una rueda de prensa. Santos también ha explicado las causas de la catástrofe, aclarando que la noche del viernes «se produjo el 30% de la lluvia de un mes», lo que provocó el desbordamiento de los ríos Mulato, Sangoyaco y Taruca la madrugada del sábado 1 de marzo de 2017.
La alta representante para la Política Exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, y el comisario europeo de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides, han mostrado su solidaridad y han asegurado que el bloque comunitario está dispuesto a ofrecer su ayuda al Gobierno colombiano.
«La Unión Europea, un socio cercano de Colombia, está dispuesta a proporcionar toda la ayuda necesaria en estos momentos tan difíciles», reza un comunicado publicado en el portal de la Comisión Europea.