México está que arde. Se debate entre los defensores del salvaje ataque perpetrado durante la noche del viernes 19 de mayo de 2017, y aquellos otros que opinan que se han pasado tres pueblos. Mientras tanto, Aleksei Viktorovich Makeev, un ruso de 42 años, se encuentra en estado grave en el Hospital general de Cancún, Quintana Roo, con un traumatismo en la cabeza, lesiones en los brazos y en la espalda.
Se los causó una enloquecida turba con palos y piedras cuando se refugió en el tejado de su vivienda, tras hacer frente a un grupo de vecinos en su domicilio. A uno de ellos, un joven llamado Carlos Eduardo Gutiérrez, lo mató de una puñalada en el corazón durante el enfrentamiento, antes de refugiarse en el tejado y caer inconsciente de una certera pedrada. La gente creyó entonces que lo había matado, y cejaron los ataques y las amenazas: «Ya te cargó la verga, hijo de tu puta madre», «vamos a darle», «¡quémalo!», «te vas a morir».
Los vecinos, cansados de que subiera a su cuenta de YouTube vídeos en los que filmaba a los mexicanos en calles y lugares públicos cubriéndoles de insultos racistas en ruso, inglés y chapurreando algo de español, se habían congregado en la afueras de su casa en la supermanzana 70 de Cancún para darle una lección.
Si se recupera de la paliza, Makeev, instructor de un parque acuático que ya hacía de las suyas en su país de origen y que estuvo incluso ingresado en una institución mental, será deportado a Rusia por sus agresiones a los mexicanos, según ha informado el Instituto Nacional de Migración.
«Los mexicanos solo saben reproducirse. Son gusanos, monos que solo quieren sexo», afirmaba mientas grababa a niños en los McDonald´s, haciendoles peinetas o insultaba a mujeres con bebés en brazos en centros públicos.
No está claro cuánto lleva viviendo en Cancún el iracundo, bautizado en las redes como #LordNaziRuso, pero Aquaworld, una compañía que ofrece tours marítimos en esta ciudad mexicana, asegura ahora en un comunicado en Facebook que el ruso había sido despedido de su nómina en noviembre de 2015, debido a su comportamiento agresivo.
El Instituto Nacional de Migración de México dijo en una declaración que se habían presentado múltiples denuncias contra Makeev, de quien algunas versiones afirman que es ucraniano, por su comportamiento y que estaba buscando la cooperación de autoridades rusas para deportarlo.