Egipto podría condenar a seis meses de cárcel o a pagar una multa de entre 50 y 240 euros a los padres que les pongan a sus hijos nombres occidentales como Lara, Mark o Sam, según publican varios medios internacionales.
Según da cuenta ‘El Economista‘, el Comité de Quejas y Sugerencias del Parlamento de Egipto se ha reunido este martes 13 de junio de 2017 para discutir este proyecto de ley, presentado por el diputado Bedier Abdel Aziz. La ley impondría una multa, y en algunos casos una pena de prisión, a las personas que le pongan a sus hijos nombres extranjeros.
¿El motivo? Según el impulsor de este proyecto de ley, nombres occidentales como Lara, Mark o Sam son difíciles de pronunciar para los árabes. «El uso de estos nombres occidentales y el abandono de los árabes llevará a un cambio no deseado y radical en nuestra sociedad y cultura. Nuestros hijos ya no estarán conectados con su verdadera identidad», ha insistido Bedier Abdel Aziz.
Si el proyecto de ley consigue aprobarse, Egipto se unirá a la lista de países que han impuesto sanciones a los nombres occidentales. En 2014, Arabia Saudita prohibió 51 nombres que tenían orígenes extranjeros, connotaciones religiosas o contradecían las tradiciones sociales. Nueva Zelanda, Dinamarca, Noruega, Alemania, Francia y Suecia también prohíben que los padres les pongan a sus hijos nombres que puedan ofender a los demás o sean difíciles de pronunciar, según recoge Newsweek.
El proyecto de ley ha causado una gran indignación entre gran parte de los usuarios de redes sociales, ya que consideran que se trata de una cuestión trivial que el Parlamento no debe perder ni un minuto en discutir.
Entre otros proyectos de ley que también se discutían este viernes está el que impone una multa a las parejas que rompan su compromiso sin razones justificables.