El asesinato de Jamal Khashoggi sigue dejando secuelas. Tesoro de Estados Unidos anunció sanciones económicas contra 17 funcionarios sauditas presuntamente vinculados con el asesinato del periodista, incluyendo altos asesores del príncipe heredero Mohamed bin Salman, quien quedó fuera del listado. (Las últimas palabras de Khashoggi: «Me ahogo, quítame esta bolsa de la cabeza. Soy claustrofóbico»)
«Los funcionarios sauditas que estamos sancionando estuvieron involucrados en el aborrecible asesinato de Jamal Khashoggi. Estas personas que atacaron y mataron brutalmente a un periodista que residía y trabajaba en Estados Unidos deben enfrentar consecuencias por sus acciones», dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
Además, el funcionario exigió a la monarquía petrolera que «tome los pasos apropiados para finalizar la persecución de disidentes políticos o periodistas».
Los funcionarios sancionados
El Tesoro estadounidense destacó el rol de Saud Al-Qahtani, un funcionario que «fue parte del planeamiento y ejecución de la operación que llevó al asesinato» de Khashoggi en el consulado saudita en Estambul. (El relato oficial: Jamal Khashoggi fue estrangulado y cortado en pedazos apneas entrar al consulado saudí)
Además indicaron que la operación fue «coordinada y ejecutada» por su subordinado, Maher Mutreb. Además, apuntó contra 14 funcionarios que «participaron» de la operación: Salah Tubaigy, Meshal Albostani, Naif Alarifi, Mohammed Alzahrani, Mansour Abahussain, Khalid Alotaibi, Abdulaziz Alhawsawi, Waleed Alsehri, Thaar Alharbi, Fahad Albalawi, Badr Alotaibi, Mustafa Almadani, Saif Alqahtani, y Turki Alsehri.
Por último, el gobierno estadounidense sancionó a Mohammed Alotaibi, quien era el cónsul general durante el asesinato del periodista.
En consecuencia, «cualquier propiedad de estos individuos que estén bajo jurisdicción estadounidense queda bloqueada», mientras que se prohibe a los ciudadanos norteamericanos que participen en transacciones que los involucren.
La Casa Blanca evitó durante varias semanas emitir una condena contra Arabia Saudita y la monarquía, acusada de haber orquestado el crimen. Washington y Riad sostiene una larga alianza estratégica clave para Medio Oriente, aunque el vínculo bilateral ha sido puesto bajo evaluación ante la ola de críticas contra el reino.