Es la ‘historia interminable’ y otra vez sangre, dolor y dudas (Masacre en Veracruz: «Al bebé le dispararon varias veces y nos obligaron a mirar»).
El mismo drama de siempre y sólo cambia la cifra en esta gran locura estadounidense.
Un hombre armado con una pistola y un rifle entró la tarde del 31 de mayo de 2019 en el complejo municipal de Virginia Beach, en el estado de Virginia (EE.UU.) y abrió fuego indiscriminadamente.
Dejó doce muertos y seis heridos. El pistolero, veterano d ela Guardia Nacional, también falleció a consecuencia del fuego cruzado con los 4 agentes que acudieron a toda prisa y con los que intercambió balazos durante bastante minutos.
Los motivos no estaban claros. Sí ha trascendido, según explicó en rueda de prensa el jefe de la policía Jim A. Cervera, que el autor fue un trabajador de estas dependencias que conocía bien el lugar.
«Un empleado con muchos años de trayectoria en estos servicios públicos».
El tipo, que había sido despedido unos días antes, fue asesinando indiscriminadamente a personas en varias plantas del edificio.
Tiroteo en el Centro Comunal de Virginia Beach deja 11 muertos, entre ellos el atacante. Vía @NBCNews pic.twitter.com/tizYS99QAP
— Daniel Rucks (@RucksDelBo) 31 de mayo de 2019
Pese al elevado número de víctimas, el tiroteo de hoy en Virginia Beach no está entre los más mortíferos de la historia de EE.UU.
El peor de ellos ocurrió en Las Vegas (Nevada) el 1 de octubre de 2017, cuando un hombre abrió fuego desde la habitación de un hotel contra una multitud que asistía a un concierto matando a 58 personas antes de acabar con su vida.
Un año antes, el 12 de junio de 2016, un hombre asesinó a 49 personas y después se suicidó en una club gay de la ciudad de Orlando (Florida).
El tercer tiroteo más mortífero ocurrió en abril de 2007 en un campus de la Universidad Politécnica del estado de Virginia, conocida como Virginia Tech, cuando el estudiante Seung-Hui Cho mató a 32 personas antes también de suicidarse.
La matanza llega justo en un momento en el que la principal organización de defensa de las tenencia de armas de fuego en EEUU, la Asociación Nacional del Rifle (NRA, por sus siglas en inglés) está al borde del colapso financiero y en medio de un escándalo por presunta apropiación indebida de fondos por parte de su consejero delegado, Wayne LaPierre.
Claro que eso no cuestiona la excelente salud de la cultura de las armas en el país. De hecho, a partir de este mes los profesores de instituto de los estados de Texas y Florida están autorizados a llevar legalmente armas a los centros docentes.
En abril, Estados Unidos se retiró del Tratado de Comercio de Armas de Naciones Unidas que regula la compraventa de este tipo de artefactos. Las armas de fuego son el arma más letal del mundo, y han causado en las últimas décadas muchos más muertos tanto en tiempo de guerra como de paz que los aviones de combate, o la artillería.
Con 320 millones de habitantes, Estados Unidos apenas supone el 4,5% de la población mundial. Sin embargo, en ese país hay 393 millones de armas, según estimaciones de Naciones Unidas.
Eso supone el 39,7% de todas las armas de fuego del mundo, incluyendo las que están en manos de civiles y de Fiuerzas Armadas.