Las expatriaciones forzosas representan la nueva práctica que está implementando la dictadura cubana para acabar con cualquier tipo de disidencia, la están aplicando contra activistas de derechos humanos, ya son «cientos de activistas que son víctimas de esta situación». Así lo denunció Javier Larrondo, representante europeo de UNPACU y presidente de Prisoners Defenders.
Esta última organización denunció a la dictadura cubana el pasado 18 de junio ante 5 comités de Naciones Unidas, por ejercer prácticas contra los derechos humanos que implican «amenazas, detenciones, golpizas, causas judiciales falsas, penas de cárcel, asfixia laboral» y otras prácticas.
Es mejor amenazarlo de muerte, amenazar a su familia, hostigarles, pegarles, al mismo tiempo que le ofreces: ‘si te vas de la isla no va a haber ningún problema’… se ha convertido en una sistemática masiva, y en su denuncia han docmumentado 35 casos específicos.
Colaboración de la dictadura chavista – Aruba Airlines
Para llevar a los disidentes fuera del país utilizan a una dictadura asociada, la venezolana. Se sirven de la aerolínea Aruba Airlines «de capital venezolano público, maquillado como quieras». El apoyo del régimen de Maduro consiste en obligar al disidente a subirse al avión, sin la voluntad de este.
«Son capaces de meter al disidente forzado en un avión y sentarlo en un asiento, violando la normativa internacional, es lo que queremos demostrar… admitir a un pasajero, que lo metan en el avión, sin que hayan papeles de ninguna acusación, de ningún juez ni de ninguna causa que lo justifique, le meten ahí, le llevan fuera de su país y lo deja tirado… eso un comandante de una aerolínea seria no lo admite».
La investigación de Prisoners Defenders ha demostrado que la aerolínea venezolana Aruba Airlines «ha tenido un papel prominente por lo menos en 5 casos» de los que analizaron.
El rol de las organizaciones y naciones que promueven la democracia es fundamental para recuperar la democracia en Cuba, por ello Larrondo cometó que en el caso de España la labor de los técnicos ha sido positiva, sin embargo, el presidente en funciones, Pedro Sánchez, ha querido mirar hacia otro lado mientras los cubanos sufren el brutal autoritarismo del régimen.
«Pedro Sánchez no ha dado aliento a la disidencia ni nada parecido, todo lo contrario, nos ha dado la espalda»