Jesús Santrich lleva tres días desaparecido de Colombia y todo apunta a que el exlíder de las FARC se fugo a Venezuela.
Sntrich habría abandonado la zona veredal de Tierra, donde se encontraba con un grupo de excombatientes de las FARC reincorporados, el domingo 30 de junio en horas de la madrugada.
Ante el riesgo que representa una posible fuga de Santrich para la implementación del Acuerdo de Paz, la Misión de Verificación de la ONU -instancia internacional garante del cumplimiento de los acuerdos- manifestó su preocupación porque Seuxis Paucias Hernández -verdadero nombre de Santrich- haya optado por apartarse de su esquema de seguridad.
«Chatica, me fui a pasar la noche con mi hijo menor pero no quiere montonera en su casa. Así que cuando lleguen a Valledupar llamen a Daniel y me recogen, estaré listo a las 8:00. Att. Santrich» dice la carta que según afirma el quema de seguridad, Santrich habría dejado en su habitación antes de marcharse.
La ONU señala que esto podría traerle riesgos incluso a su seguridad personal y lo exhorta para que «se presente y cumpla con sus obligaciones, incluyendo la citación a indagatoria de la Corte Suprema de Justicia el 9 de julio».
Cabe destacar que pese a tener un pedido de extradición por parte del gobierno de los estados Unidos, Jesús Santrich no tiene hasta el momento órdenes de captura en su contra por lo que formalmente no sería un fugitivo, situación que cambiaría de no comparecer ante la Corte Suprema de Justicia.
El presidente Iván Duque también se refirió al caso de Santrich y dijo que el que se haya apartado de su esquema de seguridad es una clara muestra de que el exguerrillero quiere eludir la justicia.
«Ver a una persona con semejantes características abandonar su esquema de seguridad, violando los protocolos de la Unidad Nacional de Protección, violando los protocolos de seguridad del ETCR, solo muestra que su deseo es eludir la justicia», afirmó Duque.
El presidente colombiano ha sido un detractor público de Santrich, apartándose incluso de las recientes decisiones judiciales de la JEP, el Consejo de Estado y la Corte Suprema de Justicia que lo pusieron en libertad y le permitieron posesionarse como Representante a la Cámara en nombre del partido FARC.
Para Duque es claro que Santrich quiere «burlarse de la justica» y afirmó que el Estado de derecho va a «hacerse respetar».
Las palabras de Duque se suman a las expresadas por Emilio Archila, Consejero Presidencial para la Estabilización y la Consolidación, quien afirmó que de no comparecer ante la Corte «el Gobierno considerará que abandonó el proceso de paz y deberá responder ante la justicia ordinaria para asumir las consecuencias por haber cometido delitos después de la firma de los acuerdos».
Con el correr de las horas toma fuerza la versión de que Santrich habría cruzado la frontera y se encontraría en Venezuela. Esto según lo informado por Bernardo Hoyos, exalcalde de Barranquilla quien es aliado político del partido FARC.
Hoyos manifestó que a las 3:30 del domingo tenía organizada en Barranquilla una recepción para el líder insurgente, pero por un supuesto atentado contra su vida, que habría conocido horas antes de viajar a Barranquilla, Santrich no se hizo presente.
«Es preferible un Santrich fuera del país que un Santrich asesinado», afirmó Hoyos.
La oficialidad del FARC se pronunció en contra de la decisión de Santrich de apartarse de su esquema de seguridad, pero esta no ha sido la única voz de rechazo desde los sectores afines al proceso de paz y a la propia exguerrilla.
El senador Iván Cepeda, que acompañó a Santrich a salir de la Fiscalía cuando fue liberado, afirmó: «Que en este momento no se tenga certeza de cuál es su paradero y que haya incertidumbre de que él cumpla con el compromiso adquirido, con el Acuerdo de Paz y ante la justicia, todo eso motiva inquietud. Le pedimos a ‘Santrich’ que cuanto antes haya claridad».
Por su parte Gustavo Petro, excandidato presidencial y líder de la oposición de izquierda en el país les solicitó a los militantes de las FARC «no imitar al uribato», en referencia a los exfuncionarios del gobierno de Álvaro Uribe Vélez que no han cumplido con los requerimientos de la justicia, como es el caso de Andrés Felipe Arias, quien se encuentra en Estados Unidos.
«Si la justicia llama, atenderla, respetarla, no eludirla si en realidad se quiere la paz», señaló Petro.
Aparte de la audiencia del 9 de julio, Santrich todavía tiene pendientes con la Jurisdicción Especial de Paz (JEP). De acuerdo a recientes declaraciones, la JEP requiere a Santrich no solo porque tiene pendiente el fallo en segunda instancia sobre su principio de no extradición -que le fue concedido en primera instancia junto con su libertad porque la Fiscalía no allanó las pruebas necesarias- sino un proceso conjunto con otros 31 integrantes del secretariado de las Farc por secuestro.
Así las cosas, el polémico exguerrillero podría verse despojado de los beneficios jurídicos del Acuerdo de Paz si se llega a confirmar su fuga e incluso podría afectar al partido FARC haciéndole perder el curul que estaba ocupando en el Congreso de la República.