Aunque la postura de Europa y algunos países de América Latina apuesten por un diálogo casi que sin condiciones, el gobierno de Estados Unidos tiene claro el camino de que devolverá la democracia a Venezuela.
El secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, dijo el sábado que es «inconcebible» que Venezuela tenga elecciones libres y justas si el dictador Nicolás Maduro sigue presente en el país petrolero.
Las declaraciones de Pompeo se producen en momentos en que delegaciones del dictador Nicolás Maduro y del presidente interino Juan Guaidó, mantienen reuniones en la isla de Barbados como parte de las conversaciones que arrancaron hace dos meses, bajo la mediación de Oslo.
«Sin minimizar lo que está sucediendo en Barbados, por supuesto, y lo que está sucediendo con las conversaciones (…) sería inconcebible tener elecciones que realmente representen al pueblo venezolano si Maduro sigue estando presente en el país«, explicó Pompeo a periodistas.
«Mientas los cubanos sigan protegiendo a Maduro no van a poder celebrarse elecciones justas y equitativas», agregó a través de un intérprete, tras una reunión con el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, en la porteña ciudad de Guayaquil.
La cancillería noruega ha dicho que las conversaciones avanzan en una mesa que trabaja de manera «continua y expedita», pero no se han especificado los puntos que incluye la negociación.
Venezuela enfrenta un colapso económico que ha llevado a la migración de unos cuatro millones de personas, según Naciones Unidas, aunque estudios extraoficiales hablan de más de seis millones de migrantes venezolanos.
Pompeo, procedente de Argentina en el marco de su gira por algunos países latinoamericanos, resaltó la postura de Ecuador frente a la situación política y la ayuda brindada a la población venezolana que llega a su país.