La Fiscalía General del Estado de Veracruz investiga la posible participación de miembros de la Secretaría de Seguridad Pública en el homicidio de cuatro personas. El titular de la institución, Jorge Winckler Ortiz, dijo en conferencia de prensa que se investiga la posibilidad de que la desaparición forzada de estas personas se haya dado en colaboración con elementos de la SSP.
Las cuatro personas, cuyos cuerpos fueron descuartizados y posteriormente guardados en bolsas negras, fueron encontrados en el municipio de Maltrata. De acuerdo con el fiscal, hay indicios que los hermanos Irving y Bryan fueron levantados por los agentes, junto a otros dos hombres.
Fueron privados de su libertad el pasado 5 de agosto; cuando los encontraron, habían sido desmembrados y abandonados en la carretera.
Tras llevar a cabo la identificación de los cuerpos, se confirmó que se trataba de Bryan, de 26 años; Irving, de 23 años; Jonathan Paul, de 28 años, y Clemente, de 60 años, todos pobladores de Río Blanco. Ésta última víctima contaba con un reporte de desaparición forzada, presentado por sus familiares.
«Todos estos cuerpos ya fueron identificados y entregados a sus familiares. Según los dictámenes de la necropsia, se desangraron y eso provocó su muerte. Fueron degollados, por lo cual fueron desmembrados aún con vida».
La carpeta de investigación 680/2019 fija su desaparición en Orizaba, luego de que los policías entraran a su domicilio, lo sacaran y subieran a una patrulla, sin que posteriormente fuera llevado ante un juez para informarle sobre las causas de su detención.
«Los testigos refieren que cuatro patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública y elementos de esa corporación ingresaron al domicilio de las víctimas, se los llevaron esposados con golpes y patadas a bordo de las unidades; sus familiares acudieron a los centros de detención de la policía estatal y municipal y de la UECS para pedir información de los detenidos, sin que en ninguno de estos sitios hayan sido puestos a disposición».
El crimen en Veracruz
Quince bolsas contenidas con los restos de los cuatro cuerpos fueron abandonados en la zona montañosa de Veracruz la tarde del 8 de agosto.
La SSP confirmó que encontraron dichos restos humanos en el tramo El Conejo y señaló como información preliminar que los cuerpos abandonados eran de personas oriundas de la localidad.
Dos días después, fueron encontrados los restos de cinco personas, cuatro hombres y una mujer, en el municipio de Vega Alatorre, en la zona costera del estado.
Los ataques casi simultáneos hicieron que el gobierno de Veracruz advirtiera que «no permitirán venganzas entre grupos delictivos, ni que homicidas intenten alargar la aplicación de la justicia arrojando los cuerpos de sus víctimas en parajes y ocultando evidencias».