La separación de Bradley Cooper, de 44 años, y la modelo Irina Shayk, de 33, hace unos meses generó todo tipo de rumores. Incluso se señaló a Lady Gaga, coprotagonista del galán en a Star is Born, como la tercera en discordia. El tiempo pasó y las especulaciones se diluyeron y los involucrados siguieron con sus vidas.
Sin embargo, por estos días, el actor y director volvió a ser noticia debido a su radical cambio look, muy alejado del que lució cuando interpretó al músico caído en desgracia Jackson Maine en la película que le valió a Gaga su primer Oscar.
Cooper paseó con su hija Lea de Siene y los parazzi lo retrataron llevando un tupido bigote y un nuevo corte de pelo al estilo Ned Flanders de Los Simpson. Muchas creen que esta transformación se deba a un nuevo papel en la pantalla grande.
El intérprete estadounidense fue visto primero haciendo unas diligencias junto a su hija, y luego disfrutó con ella un día de juegos en el parque Disneyland de Los Ángeles.
Cooper disfrutó de un día en Disneyland de Los Ángeles con la pequeña. Padre e hija fueron retratados en muchas de las atracciones del parque. Incluso el actor se tomó tiempo para sí mismo y también fue visto pasando un buen momento arriba de las montañas rusas.