La obsesión de Donald Trump por el muro fronterizo le ha generado un nuevo problema, y el Cogreso de los Estados Unidos iniciará una nueva investigación al respecto.
La Oficina de Rendición de Cuentas (GAO, por sus siglas en inglés) del parlamento estadounidense investigará las presiones de la administración Trump para tomar por la fuerza tierras privadas en la frontera con México con el fin de construir su tan prometido muro.
Esta oficina independiente indagará en el tema a petición de legisladores demócratas, según anunció Chuck Schumer, líder de la minoría en el Senado. En una carta que publicó CBS News, GAO dijo que consultará con el inspector general del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para evitar duplicar los trabajos de ambas entidades.
“Esta administración trata de llevarse propiedades privadas de estadunidenses sin ninguna supervisión y sin proporcionar información básica al respecto, como de cuántos ciudadanos tomaran terrenos”, declaró Schumer este miércoles. La petición busca resolver incógnitas generadas el mes pasado sobre el número de afectados, el costo de las propiedades y el tiempo que llevará compensarles por la pérdida de sus tierras.
Otros senadores demócratas también se pronunciaron al respecto. Dick Durbin recordó que las tierras pertenecen a los residentes y no al gobierno federal. Por su parte, Tom Udall (de Nuevo México) recriminó que el gobierno invocara un presunto derecho de tomar propiedades privadas para uso público. Udall mostró también su preocupación sobre que los vecinos quedaran separados y la tribus perdieran su soberanía.
De acuerdo a CBS News, la administración se podría respaldar en el llamado “dominio excepcional” para expropiar las tierras que necesite siempre que recompense a los propietarios por ella. Sin embargo, muchos de los dueños de los terrenos previsiblemente afectados se oponen a la intención del gobierno y ya están llevando sus casos a los tribunales.
