El candidato del Partido Verde, Antanas Mockus, demostró nuevamente que sus maneras distan de las de un político tradicional y puso hoy punto final a su campaña presidencial pidiendo el voto «puerta a puerta» una semana antes de la segunda vuelta electoral.
Mientras su rival en las urnas y favorito a ganar la Presidencia, el oficialista Juan Manuel Santos, despedía los actos de campaña en la ciudad de Medellín, Mockus recorrió las calles del humilde barrio del Rincón de Suba, al norte de Bogotá, bajo el lema «no cerramos campaña, abrimos puertas».
Esta populosa población a las afueras de la capital colombiana vio como sus calles se teñían del verde de las camisetas de los seguidores del ex alcalde bogotano, que visitó a algunas familias para tratar de convencerlas personalmente para que opten por su candidatura.
Y es que uno de los objetivos de Mockus es derrotar no solo a su rival en las urnas, sino también al elevado abstencionismo que se registró en la primera vuelta, un 51 por ciento, y que cree que es la llave que le permitiría dar la vuelta a la abultada diferencia que logró Santos el pasado 30 de mayo.
«Sería un desastre que hubiera menos votos en total que en la primera vuelta, sería lamentable y una fuente de tristeza», admitió a los periodistas Mockus, que por ello se puso manos a la obra y lideró el «toc toc» con el que sus seguidores tratarán de convencer, casa por casa, a miles de ciudadanos antes del domingo.
«Mockus representa cultura, honestidad y lealtad, y eso es lo que queremos para nuestros hijos», dijo una madre que recibió en su casa al candidato, que la escuchaba sentado en el sofá y rodeado de los demás miembros de la familia, entre ellos un pequeño niño que dijo sentirse orgulloso «de sus padres».
«Niños orgullosos de sus padres los habrá más si la gente nos elige, porque atenderemos más a estas edades. Antes de los 5 años, los niños son como esponjitas, aprenden, comprenden, y si tienen la suerte como estos niños de tener unos padres buenos, o si ayudamos a que los papás entiendan más la responsabilidad respecto a esa edad, estos niños crecerán mucho mejores», explicó Mockus.
El aspirante lamentó, sin embargo, que su rival haya «armado una guerra de rumores» contra él, por lo que con estas visitas pretende desmentir esos ataques.
A su juicio, el próximo 20 de junio «es un día decisivo, ya que Colombia toma uno de dos caminos, el de innovación, ciudadanía, respeto a la vida y educación, o el otro camino, que combina cosas serenas y fundamentadas con una tolerancia y convivencia muy grande con el clientelismo».
El candidato advirtió que Santos «ha sido el defensor número uno del clientelismo. Él tiene una habilidad que yo no quiero tener», la de «combinar politiquería con trabajo serio».
Ante la mirada atenta de la familia, Mockus subrayó que «ésta es una conversación sin favores».
«No vine a ofrecerles una beca a cambio de conseguir un voto. Es un voto desinteresado, de construcción de confianza», manifestó.
Asimismo, volvió a descartar una alianza con otras formaciones en contraposición a lo que ha hecho su rival: «se necesita como cierta actitud de sobradez como para ir ofreciendo alianzas antes de la segunda vuelta. La segunda vuelta está diseñada para que compitamos férreamente».
Es por ello que, mientras abandonaba agradecido la casa que le acogió durante unos minutos, Mockus volvió a recordar que su estrategia es la de «ir de puerta en puerta, abriendo corazones, y abriendo caminos para la propuesta del Partido Verde».