Las escuchas se realizaban desde "una plataforma móvil" en Quito para "intervenir teléfonos fijos y celulares (móviles)", que se situaba en dos apartamentos del centro de la ciudad y otro en una zona del norte, agrega
La Fiscalía de Ecuador anunció ayer que abrirá una indagación sobre la información publicada por el diario El Universo que afirma que agentes de inteligencia de Colombia supuestamente intervinieron teléfonos de la oficina del presidente ecuatoriano, Rafael Correa.
El fiscal general, Washington Pesántez, dispuso que «el Departamento de Cooperación Internacional y el de Indagaciones Previas actúen de oficio en este asunto relatado por el diario «así como que «un fiscal viaje a Colombia para que investigue e informe», precisó la Fiscalía en un comunicado.
De acuerdo con información facilitada al rotativo por una fuente no identificada, presuntamente del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), organismo de la policía secreta colombiana, en el marco de una operación denominada ‘Salomón’, supuestamente interceptó «teléfonos de Correa, de sus cercanos colaboradores, de militares y periodistas» ecuatorianos.
Pesántez consideró que acciones de inteligencia de tal naturaleza «atentan contra la soberanía y la seguridad interna» del país.
Por su parte, el fiscal general subrogante, Alfredo Alvear, declaró a medios locales que «no se puede dejar que ningún delito se cometa en la impunidad» y que «no se puede atentar contra la soberanía del Estado», por lo que la Fiscalía iniciará la investigación.
Según el citado diario, «la mayor parte de los números de teléfonos interceptados por el DAS en Quito pertenecen a listados entregados por oficiales y suboficiales de la Policía de Ecuador».
La operación ‘Salomón’
El Universo señala que esos oficiales fueron reclutados por detectives colombianos, vinculados a la operación de contraespionaje ‘Salomón’, que «recibieron sobornos de fondos de gastos reservados de la Presidencia de Colombia».
Las escuchas se realizaban desde «una plataforma móvil» en Quito para «intervenir teléfonos fijos y celulares (móviles)», que se situaba en dos apartamentos del centro de la ciudad y otro en una zona del norte, agrega.
Además, según el matutino, la plataforma «todavía se encontraría en esa ciudad».
La supuesta operación de inteligencia colombiana presuntamente comenzó después de un bombardeo de Colombia en territorio de Ecuador contra un campamento clandestino de la guerrilla de las FARC, realizado sin previo aviso ni permiso de las autoridades de Quito, en marzo de 2008.
En ese ataque murieron al menos 26 personas, entre ellas el entonces portavoz de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), alias Raúl Reyes, cuatro universitarios mexicanos y un ciudadano ecuatoriano.
Ecuador rompió relaciones con Colombia a causa de dicho ataque y aunque hubo conversaciones y avances para restablecerlas, aún no se ha logrado plenamente, a nivel de embajadores.
La información de El Universo se suma a varias declaraciones de agentes del DAS que han denunciado ante las autoridades judiciales de Colombia la creación, durante el Gobierno de Uribe, de un grupo especial para espiar a personalidades, entre ellas, embajadores y diplomáticos de Venezuela, Ecuador y Cuba.
Colombia niega las acusaciones
La Central de Inteligencia de Colombia negó el lunes las actividades de espionaje.
«El DAS no ha realizado ninguna actividad irregular de inteligencia en territorio ecuatoriano. De ninguna manera y bajo ningún medio el DAS ha intervenido en la privacidad del presidente de la República del Ecuador, Rafael Correa, o de ciudadano ecuatoriano alguno», dijo un comunicado oficial.
«Hay personas que intentan con informaciones tergiversadas confundir a los medios de comunicación y a la opinión pública, con el fin de enturbiar el camino de mejoramiento de las relaciones entre los dos países», precisó el comunicado del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS).