Chávez y Santos buscarán en la caribeña Santa Marta el fin de la crisis diplomática

Chávez y Santos buscarán en la caribeña Santa Marta el fin de la crisis diplomática
. EFE/Archivo

Los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Venezuela, Hugo Chávez, eligieron la ciudad de Santa Marta, en el Caribe colombiano, para celebrar mañana una reunión clave en la que buscarán dirimir una grave crisis que derivó el pasado 22 de julio en la ruptura de las relaciones diplomáticas.

La cita tendrá lugar pasado el mediodía en la Quinta de San Pedro Alejandrino de Santa Marta, sitio donde falleció el Libertador Simón Bolívar en 1830 y que hoy es un museo en su memoria, confirmaron fuentes del Gobierno colombiano.

El gobernante venezolano llegará poco antes al aeropuerto Simón Bolívar de esa ciudad caribeña y de inmediato se dirigirá a la Quinta para la reunión con su homólogo colombiano.

Se espera que en las próximas horas llegue una avanzada con el canciller venezolano, Nicolás Maduro, quien ayer pactó la cita con su homóloga colombiana, María Ángela Holguín, para adelantar los detalles de la visita de Chávez a Colombia.

Santos viajará en la mañana del martes a ese balneario del norte de Colombia junto con Holguín y otros ministros, que también estarán presentes en la trascendental cita con la que se busca recomponer las relaciones diplomáticas y comerciales entre los dos países, rotas desde julio pasado.

Hasta allí hoy se desplazaron los encargados de la logística y comenzó el despliegue de seguridad.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, deseó «suerte» al presidente Santos en la reunión que mantendrá mañana con Chávez, se declaró «optimista» sobre la posibilidad de que los dos mandatarios logren alcanzar un entendimiento y anunció una visita del gobernante colombiano a su país el primero de septiembre.

«Le pido a Dios suerte a Santos en su reunión con Chávez. Que Dios lo bendiga para que construya la paz que todo el mundo quiere», dijo Lula en una rueda de prensa en Sao Paulo junto al presidente de El Salvador, Mauricio Funes.

Los votos vinieron de todas partes y el ex presidente colombiano Andrés Pastrana (1998-2002) le pidió a la memoria del Libertador Simón Bolívar «iluminar» a Santos y Chávez para un pronto restablecimiento de las relaciones diplomáticas y comerciales.

Pastrana aplaudió la decisión del nuevo Gobierno colombiano de iniciar los diálogos con los países vecinos, luego del rompimiento de las relaciones diplomáticas con Ecuador y Venezuela.

El menos conciliador fue el ya ex gobernante Álvaro Uribe, bajo cuya Administración se rompieron las relaciones bilaterales, al llamar hoy «cobarde» a Chávez por lanzarle «insultos a distancia» y llamarlo un «lacayo del imperio» (Estados Unidos).

En su perfil de la red social Twitter, Uribe «notificó» al presidente venezolano «para que deje de ser cobarde lanzando insultos a distancia».

Esa animadversión fue la que llevó el pasado viernes a su abogado, Jaime Granados, a interponer una denuncia contra Chávez ante la Corte Penal Internacional (CPI) y una demanda contra la República Bolivariana de Venezuela ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) por violaciones a los derechos humanos y la presencia de guerrilleros colombianos en Venezuela.

En respuesta, el fiscal jefe de la CPI, Luis Moreno Ocampo, confirmó hoy a Efe en Buenos Aires que el organismo «analizará» la «comunicación» del ex presidente colombiano contra Chávez, antes de decidir si abrirá una investigación.

La presentación de Uribe «la hizo él como ciudadano. Todos los ciudadanos tienen derecho a hacer eso y nosotros analizamos la información para ver si hace falta hacer algo o no», señaló el argentino Moreno Ocampo.

En Washington, la CIDH explicó hoy que estudia todas las peticiones antes de decidir si las admite a trámite, por lo que haría lo mismo con la demanda de Uribe, sin confirmar si la ha recibido.

«Toda petición que llega a la Comisión tiene carácter confidencial hasta que haya una decisión sobre si es o no admisible», dijo a Efe una portavoz de la CIDH.

Tras hacerse público que este martes Chávez y Santos celebrarían la histórica reunión, el nuevo mandatario colombiano manifestó: «yo espero que de esa reunión podamos sacar conclusiones que nos lleven a normalizar las relaciones entre los dos países».

Chávez rompió el pasado 22 de julio las relaciones con Colombia después de que el Gobierno de Álvaro Uribe denunciara ante la Organización de Estados Americanos (OEA) que Venezuela albergaba grupos guerrilleros dentro de sus fronteras.

Si bien Chávez hizo ese anuncio formal hace sólo unas semanas, las relaciones diplomáticas y comerciales estaban congeladas desde el año pasado debido a las discrepancias de Venezuela por un acuerdo militar que Colombia firmó con Estados Unidos.

Pero, sobre todo por los choques personales que mantuvieron en los últimos años Chávez y el ex presidente Uribe.

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